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En diferentes puntos del país, los alumnos retornaron a clases ayer. Tanto en la escuela como en el colegio San Martín, cuyos docentes están afiliados a la Federación de Educadores del Paraguay (FEP), se reiniciaron las clases, tras 22 días de huelga y prácticamente dos meses de inactividad.
Las maestras del nivel inicial comentaron que el reinicio de las actividades supone un nuevo periodo de adaptación para los más pequeños, que puede durar varios días.
“Es prácticamente empezar de cero. Los niños lloran, deben volver a integrarse a la escuela”, explicó la profesora del jardín, Diana Martí.
No obstante, la situación de los grados y cursos superiores es más compleja, pues les será imposible completar el programa y terminar el año con las competencias requeridas para iniciar el próximo periodo.
Compromiso de no interrumpir
Reinalda Cárdenas de González, directora del Colegio San Martín, explicó que por lo menos en esta institución educativa, con mayoría de docentes de la FEP, las clases ya no serán interrumpidas.
“Los docentes debemos estar conscientes de que por un ideal frustrado no podemos destrozar toda nuestra carrera profesional, y por eso estamos avisando a los padres que ya no interrumpiremos las clases”, dijo en referencia al anuncio de los dirigentes de la FEP, quienes manifiestan que el lunes de la semana entrante resolverán si van o no a huelga, tras el rechazo de la modificación de la ley de jubilaciones.
Pidió a sus pares ser responsables con la comunidad educativa.
Escasa concurrencia en Ciudad del Este
CIUDAD DEL ESTE (De nuestra redacción regional). En esta zona del país el retorno de alumnos a las aulas no fue masivo. Por ejemplo, la escuela y colegio Soldado Paraguayo, del barrio Don Bosco, contó con una regular participación de estudiantes, aunque se espera que el día de hoy esa cantidad aumente.
Los docentes en general manifestaron estar tristes luego de realizar varios días de huelga, y no haber logrado su objetivo principal: la modificación de la Ley de Jubilación.