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En el marco de FCPF, Paraguay recibirá 3,6 millones de dólares que se suman a los 4,7 millones aportados por el Programa ONU REDD. Ambos programas -de carácter global- administran fondos suministrados por países que se encuentran en el Anexo 1 del Protocolo de Kyoto, como Noruega, Finlandia, Alemania, Japón, entre otros; es decir, los países más industrializados y cuyas actividades económicas generan un impacto ambiental a gran escala y contribuyen al calentamiento global.
En total, Paraguay se beneficia con más de 8 millones de dólares que serán administrados por la Secretaría del Ambiente (Seam) y que deben utilizarse en la preparación de un sistema operativo efectivo y financieramente sustentable, en la administración de los bosques de todo el territorio nacional.
Sin excusas
Según el cronograma de FCPF, en tres años Paraguay debe estar listo para gestionar y administrar sus bosques, según se concluyó en el encuentro internacional.
Esto a su vez implica la creación de un fondo de recursos a ser utilizados en la aplicación de incentivos económicos a propietarios que se abstengan de deforestar las zonas boscosas que se encuentren dentro de sus límites, como funciona el programa en otros países como Guatemala y México.
Estos fondos provendrán de impuestos a los hidrocarburos, servicios ambientales o hasta por el uso del agua, según explicó el Ing. Rodrigo Mussi, representante de la Secretaría del Ambiente durante el encuentro.
Acerca del inventario
El inventario forestal nacional, que abarcará toda la superficie del territorio paraguayo, es un estudio que debe estar concluido para finales del próximo año, según explicó Mussi.
Al final del mismo habrá datos oficiales, medibles y verificables sobre el estado actual de los bosques y el impacto real de la deforestación, adelantó el funcionario de la Seam.