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“Ha liderado procesos de forma adecuada, por lo que puedo resumir que las cosas se hicieron bien”, sostuvo el representante de la OPS, Gustavo Vargas, al referirse al trabajo realizado por Arbo.
Resaltó que la circulación viral de dengue que se registra actualmente en el país es una de las más severas en comparación a años anteriores. “Esta ha sido una de las peores epidemias, con manifestaciones clínicas muy severas, difícilmente vistas en los últimos años”, aseguró.
Explicó que desde el desarrollo de la presente contingencia, el Programa Regional de la OPS/OMS ha realizado un seguimiento y monitoreo de la situación epidemiológica. “Desde la oficina del Centro Regional hemos apoyado muy de cerca las actividades del Ministerio de Salud local, por lo que podemos decir con tranquilidad que las cosas se han hecho de forma adecuada”.
“Estamos hablando de un volumen de asistencia importante que supera los 100.000 pacientes, cifra que difícilmente cualquier sistema de salud hubiera podido soportar”, ponderó.
Reconoció que, pese a la incidencia de casos, Paraguay cuenta con una letalidad relativamente baja. “Con esto podemos afirmar que el sistema respondió adecuadamente a la contención y respuesta de esta enfermedad”, añadió.
Por otro lado, durante la reunión del Consejo Nacional de Salud, Arbo dijo que “si no hubiésemos previsto un plan anticipatorio para esta contingencia, si no se hubiese aumentado la disponibilidad de camas y la compra masiva de sueros, de las 15.000 hospitalizaciones que se registraron a lo largo de este tiempo por el virus, solamente iban a ser hospitalizados 5.500 pacientes; el resto, unas 9.500 personas (grupo de alto riesgo a sufrir complicaciones), no habría sido hospitalizado y probablemente habría muerto por dengue”, aseveró el ministro al recordar que el número de camas era de 348 y aumentó a 683.