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El pindo adornado tiene sus tradicionales elementos: romero, ruda y la flor siempre vive, que serán bendecidas mañana en todas las iglesias del país durante la misa de Domingo de Ramos, recordando la triunfal entrada de Jesús a Jerusalén.
Gabriela Martínez vende la palma a G. 5.000 por unidad. “Pero si llevas la docena, te sale solamente G. 15.000 y es lo que la mayoría lleva ya para toda la familia. En esta época suelo vender 300 ramos”, contó sonriente.
En el paseo de los yuyos los costos son aún más accesibles. Sara Galeano cuenta que están teniendo buena venta, aunque hoy será un día clave para el comercio. “Nosotros crecimos tejiendo. Es una tradición de toda la familia hacer este pindo”, señaló, mientras terminaba rápidamente de decorar su ramo. Los precios van desde G. 3.000 o dos ramos por G. 5.000. Invitó a los clientes que los visiten.
Doña Cristina Amarilla, sentada en un sillón cable, bajo su techo de paja, también teje apresuradamente una palma que es, sin duda, el ramo más bello, elegante y también el más costoso del Mercado 4. “Estos ya son para los altares, son grandes, decorados y hechos con tanto amor”, enfatizó la artesana. Cada ramo de estos está a G. 50.000.