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Mons. Juan Espinoza, obispo auxiliar de Morelia, México, y secretario del Consejo Episcopal Latinoamericano, explicó en conferencia de prensa que el curso bíblico busca promover con las conferencias episcopales una Iglesia misionera y en salida; pobre para los pobres, que tenga una mirada hacia adentro y una conversión pastoral de su acción; que mantenga un diálogo continuo con el mundo, con las realidades sociales y políticas; con las realidades económicas; en diálogo continuo con la cultura actual. “La intención es anunciar a Jesucristo que es vida plena para nuestros pueblos y cada persona”, indicó.
El curso bíblico que comienza hoy está destinado a los obispos, a quienes se suman 11 prelados venidos de otros países del continente.
El padre Guillermo Acedo, de Colombia, explicó que el curso se centrará en el evangelio de Mateo, enfatizado en las bienaventuranzas.
El obispo Espinoza explicó que la Iglesia latinoamericana está en su mejor momento y ha dado un fruto maduro como es el papa Francisco y a nivel mundial también está llamada a ir a las periferias. Se quiere una Iglesia en salida hacia los pobres, enfermos y alejados. Agregó que el curso sensibilizará en esa dirección porque así lo enseñó Jesús en las bienaventuranzas que son el programa pastoral del Pontífice. “La palabra de Dios debe estar en el corazón de la Iglesia y en ese proceso y cada vez que se tiene una coyuntura nueva como el Año de la Misericordia y los tres años de pontificado del papa Francisco debemos participar con una mejor formación y en esta ocasión se hace con el evangelio de Mateo. Estamos ayudando para mejorar el magisterio de los obispos”, resaltó.
El arzobispo de Asunción, Mons. Edmundo Valenzuela, indicó que los obispos también deben profundizar la Biblia para llegar mejor al pueblo de Dios, a través de los sacerdotes, diáconos, catequistas y laicos. Por otra parte, la próxima semana del 11 al 16 de setiembre, Paraguay será sede del Encuentro de Comunidades de Base de América Latina. Estarán aquí 350 delegados de varios países en la casa de retiro Tupã Rekávo de Luque. En octubre, en cambio, será sede del Tercer Encuentro Latinoamericano de Comunicadores. Todos estos eventos fueron programados para dinamizar a la Iglesia local.