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Medina indicó que hablaron con los trabajadores y que les alentaron a seguir en la lucha por sus ideales y derechos. “Comprendemos el gran sacrificio que están realizando y creemos que lograrán su objetivo”, expresó el pastor misionero. El obispo calificó de “inhumano” el trato que están recibiendo por defender sus derechos y por exigir que se cumpla el Código Laboral.
En el lugar oraron y les animaron a no decaer en la moral, porque, según manifestó Medina, toda lucha tiene su sacrificio y que cree que los trabajadores, tarde o temprano, serán respetados en sus reclamos.
Al menos 20 choferes están bajo carpas desde el 22 de julio porque fueron despedidos de la empresa por formar un sindicato el 22 de junio, según argumentan. La Línea 49 pertenece a la familia del diputado liberal Celso Maldonado, quien dijo que los despidos fueron por una cuestión de “reestructuración administrativa y laboral” de la compañía de transporte público, que opera desde la ciudad de Limpio.
Sin embargo, los choferes afirman que demostraron con documentos que recibieron la comunicación de despido de la empresa dos días después de que los dirigentes sindicales hayan informado a Maldonado la formación del gremio. Los obreros no retiraron sus respectivas indemnizaciones, ya que exigen la reposición en sus puestos.
Los crucificados ratificaron ayer que no dejarán su medida de fuerza, salvo que el Ministerio legalice el sindicato y la Línea 49 recontrate a todos los despedidos, que en total son 37.
La cartera de Estado informó que los sindicalistas aún no presentaron los documentos para la legalización del gremio.