Mucha emoción de los artesanos en entrega oficial de silla para el Papa

Momentos de emoción se vivieron ayer al culminar la misa central de Caacupé, cuando artesanos entregaron la silla que será utilizada por el papa Francisco, durante la celebración litúrgica. Don Isabelino “Rey” Maidana y Graciela Mena coincidieron en que fueron bendecidos por haber sido elegidos para este trabajo.

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CAACUPÉ, Dpto. de Cordillera (Desiré Cabrera, de nuestra redacción regional).Artesanos entregaron ayer el sillón que utilizará el papa Francisco durante la misa que se realizará en Caacupé, el 11 de julio próximo, en un emotivo acto realizado al culminar la celebración litúrgica en el Santuario de la Virgen.

Monseñor Claudio Giménez, obispo de Caacupé, ya al final de la celebración, invitó a los artesanos a subir al altar del santuario, junto con la silla que fue totalmente tallada en madera de cedro, por Isabelino “Rey” Maidana y sus hijos oriundos de Atyrá.

La silla tallada cuenta con pintura dorada y acabado en cuero. La cabecera y las patas están tallados a mano, en el centro está colocada una plaqueta de porcelana, con la imagen de la Virgen de Caacupé, pintada a mano, realizada por la artista Graciela Mena de Asunción.

Además, en el respaldero se encuentra una pintura, realizada a mano, del escudo papal, obra del licenciado Alcides Acosta (70), un exalumno de Mirta Maidana, hija de don Rey.

Graciela Mena, visiblemente emocionada y con lágrimas en los ojos, manifestó que realizar esta obra “fue una experiencia maravillosa”, pues tuvo la oportunidad de devolver aunque sea un poco el don que Dios le brindó. Agregó que jamás se imaginó que tendría esta oportunidad. Señaló que el proceso de elaboración del trabajo fue de dos semanas, por el tratamiento especial que se le da a la porcelana fina.

A su vez, don “Rey” Maidana expresó que haber tenido la oportunidad de elaborar esta obra fue para él una experiencia inolvidable y única. Porque al principio, cuando le llegó el pedido de la realización del trabajo, él solo pensó en lucirse con su trabajo. Sin embargo, tuvo una enseñanza de humildad muy grande por parte del Papa, que pedía que la silla fuera lo más sencilla posible.

Agregó que durante el proceso experimentó muchas bendiciones espirituales con su familia, desde conseguir la madera, que salió de un árbol de cedro, que cayó en un temporal que azotó Atyrá, por lo cual dijo que la misma naturaleza se asoció con él. Hasta culminar la obra en medio del asedio de los medios de comunicación.

Don Rey explicó que el proceso de elaboración de las sillas fue de un mes y medio. Asimismo, dijo que ya tiene pedidos de réplicas de la silla, una de ellas ha pedido el intendente Martín Muñoz (PLRA), de Atyrá, para el templo de San Francisco de Asís.

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