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LUQUE (Gladys Villalba Jara, corresponsal). Las religiosas de la Congregación fundada por San Vicente de Paul y Santa Luisa de Marillac iniciaron su labor como enfermeras en el Hospital de Clínicas; luego fundaron el colegio La Providencia y años después el hogar Juan Pablo II, que alberga a niños con VIH.
El carisma también se amplió para llegar al sector educativo, donde actualmente asisten a centenares de niños enseñándoles la importancia de los valores cristianos para la convivencia social y moral.
Las religiosas también atienden el Hogar de Niños y Ancianas ubicado sobre la avenida Venezuela. En las localidades del interior como Sapucai, asisten a los leprosos; y a otros necesitados en Yuty, Arroyo y Esteros, Carapeguá, La Paloma, Nueva Italia, Yby Yaú, La Pastora, Pastoreo, la penitenciaría de Tacumbú y comunidades indígenas del Chaco, entre otros.
Además de estas actividades, la comunidad tiene otras obras que apuestan a la formación de niños y jóvenes, y la ayuda en la evangelización en las parroquias.
La hermana María Isabel Ruiz, superiora provincial de las Hijas de la Caridad y otras religiosas recibieron ayer en el aeropuerto Silvio Pettirossi a la superiora general, hermana Kethleen Appler y a la hermana Ileana Suárez, consejera general en representación de América Latina. Las mismas están en nuestro país para celebrar el nacimiento del Carisma Vicentino que cumple 400 años, desde que San Vicente de Paul recibió el don del Espíritu Santo el 25 de enero de 1617, para realizar dentro de la Iglesia un servicio de misión y caridad con los más necesitados.
Este año se recuerda en Paraguay el 137° aniversario de la llegada de las Hijas de la Caridad Vicentina y se celebrará el 24 de febrero con una misa a las 19:00 horas en la Catedral Metropolitana.