Los últimos vagones, hechos taperas

Los vagones del ferrocarril Carlos A. López, últimos vestigios de un pasado de esplendor, están a la deriva, convertidos en taperas y trastos viejos. Una ignominiosa realidad en vísperas del 478° aniversario fundacional de Asunción.

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Sobre la Avda. Artigas y Fortín Toledo, a un lado del Parque Caballero, uno de los últimos vagones del ferrocarril Carlos A. López, que había quedado como vestigio para un puesto de información turística u otro uso, actualmente está convertido en tapera y ocupado por damnificados.

El vagón fue cerrado totalmente con maderas terciadas y casi no se percibe entre el caserío de emergencia instalado en el lugar.

En la zona donde se está reconstruyendo el acceso Gondra, más hacia la Estación Central, también se encuentran abandonados varios otros vagones de pasajeros que en el 2008 fueron reconvertidos para proyectos culturales y literarios.

Uno de ellos es el “Espacio recreativo cultural Amín Riquelme”, y el otro está destinado al Centro Cultural Comunitario “Dr. José Gaspar Rodríguez de Francia”, a cargo del Ministerio de Educación y Cultura, el Colegio Nacional de la Capital y el Instituto Superior de Educación. Un tercer vagón de pasajeros, mucho más antiguo, ubicado en la cabecera del andén, tiene la leyenda “Consultorio Odontológico”, pero también se encuentra en estado lamentable.

Todos ellos están con las ventanillas hechas trizas y en total abandono. En algunos casos se pueden observar que están llenos de objetos en desuso y es empleado como dormidero por algunas personas de la calle, además de indigentes y drogadictos.

“Hace tiempo que están así. Se inauguraron, y poco tiempo después fueron abandonados”, comentó una pobladora del barrio Ricardo Brugada que pasaba por el lugar.

En junio de 2008, obreros de la Dirección de Servicios Urbanos de la Municipalidad de Asunción y de Ferrocarriles del Paraguay, entre electricistas, plomeros, herreros y pintores, acondicionaron los vagones readecuándolos para dar cabida a “una galería de arte, una biblioteca y un sitio que reunirá a todo lo que tiene que ver con los cómics”.

El “vagón literario” al parecer no funcionó como tal o lo hizo por muy breve tiempo, según referencias de los vecinos. Sin embargo, pronto fueron abandonados nuevamente a su suerte y olvidados por ambas instituciones.

Todo el circuito debía formar parte del “Museo Histórico del Ferrocarril”, que, a cielo abierto, iba a presentar a la población todos los objetos que forman parte de nuestra historia.

VAGÓN JAULA

El vagón ubicado a un lado del Parque Caballero, sobre la Avda. Artigas, constituye uno de los últimos “vagones jaula” para el transporte de ganado vacuno. A principios de 1973, unos diez habían sido construidos en los talleres del Ferrocarril Carlos A. López en Sapucái. De acuerdo con una publicación de ABC Color del 10 de abril de ese año, el personal de la empresa ferrocarrilera trabajó 17 días en la fabricación de los vagones y en total se utilizaron 8.200 pulgadas de lapacho. En el 2003 cuando se abrió el Acceso Gondra desde Perú hasta la Estación del Ferrocarril se lo mantuvo en el sitio para centro de informaciones turísticas, como un copetín o heladería para el disfrute de la población.

pgomez@abc.com.py

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