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Los indígenas ache de la comunidad Kuetuvy rechazaron la intención de la Secretaría del Ambiente (Seam) de partir la finca 470 para compartir con los nativos ava guarani.
En un comunicado reivindican la propiedad de 4.600 hectáreas ubicadas en Ygatimí, Canindeyú, como territorio ancestral. Mencionan la larga lucha que tuvieron para protegerlo y así como los procesos que se desarrollaron a favor de ellos, hasta que apareció el actual ministro de la Seam, durante cuya administración tuvieron grandes retrocesos.
En ese sentido, sostienen que Oscar Rivas, por medio de la Res. 662/10, violando tratados internacionales sobre derechos de los pueblos indígenas, resolvió unilateralmente dividir la finca 470 entre el pueblo Ache y dos parcialidades ava, que son apoyadas por la ONG indigenista Servicio de Apoyo Indígena (SAI), supuestamente "infiltrada" en la Seam. Agrega que esta actitud del Arq. Rivas "nos obligó a demandar a la Secretaría del Ambiente con el fin de anular la Res. 662/10 y, en el marco de ese juicio, el Tribunal de Cuentas, segunda sala, ordenó a la Seam suspender los efectos de esa resolución".
Agrega que esta medida cautelar es la única garantía contra los atropellos de la Seam y no como sostiene el Abog. Juan Rivarola, que califica un impedimento para que la Seam les transfiera las tierras ancestrales.
El documento que lleva la firma de los líderes Martín Achipurangi y Emiliano Mbejyvangi, relata igualmente las sangrientas persecuciones que sufrieron, cuando en los años 70 fueron expulsados de su territorio ancestral y tuvieron que soportar todo tipo de vejaciones.
Finalmente, dicen que recién en el 2000 recuperaron y desde ese año la están protegiendo de invasiones.
En un comunicado reivindican la propiedad de 4.600 hectáreas ubicadas en Ygatimí, Canindeyú, como territorio ancestral. Mencionan la larga lucha que tuvieron para protegerlo y así como los procesos que se desarrollaron a favor de ellos, hasta que apareció el actual ministro de la Seam, durante cuya administración tuvieron grandes retrocesos.
En ese sentido, sostienen que Oscar Rivas, por medio de la Res. 662/10, violando tratados internacionales sobre derechos de los pueblos indígenas, resolvió unilateralmente dividir la finca 470 entre el pueblo Ache y dos parcialidades ava, que son apoyadas por la ONG indigenista Servicio de Apoyo Indígena (SAI), supuestamente "infiltrada" en la Seam. Agrega que esta actitud del Arq. Rivas "nos obligó a demandar a la Secretaría del Ambiente con el fin de anular la Res. 662/10 y, en el marco de ese juicio, el Tribunal de Cuentas, segunda sala, ordenó a la Seam suspender los efectos de esa resolución".
Agrega que esta medida cautelar es la única garantía contra los atropellos de la Seam y no como sostiene el Abog. Juan Rivarola, que califica un impedimento para que la Seam les transfiera las tierras ancestrales.
El documento que lleva la firma de los líderes Martín Achipurangi y Emiliano Mbejyvangi, relata igualmente las sangrientas persecuciones que sufrieron, cuando en los años 70 fueron expulsados de su territorio ancestral y tuvieron que soportar todo tipo de vejaciones.
Finalmente, dicen que recién en el 2000 recuperaron y desde ese año la están protegiendo de invasiones.