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El perdón y la reconciliación son fundamentos de la doctrina y cuando se hace este tipo de manifestaciones se desconcierta. Más de uno se preguntó: ¿cómo un obispo puede tomar posturas tan radicales, cuando un pastor, ante las discrepancias entre los fieles, al igual que los sacerdotes, siempre recomiendan el perdón y el diálogo?
Livieres también desconcierta tras decir en un programa de televisión que si Cuquejo “me tira una piedra, le tiro otra piedra”, y se ufana de tener muchas piedras más para tirar. Parece recurrir a la ley del Talión, del “ojo por ojo”. Según el mismo Jesucristo, hay que reemplazar esta ley por el perdón, devolviendo el bien por el mal.
¿Será esa la enseñanza que imparte a su feligresía? Ojalá que esta actitud sea solo de Livieres Plano y que su grey siga las orientaciones evangélicas sobre el perdón y la reconciliación, según algunos fieles católicos.