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“La retreta es una pieza ceremonial militar de origen europeo que se remonta al siglo XVIII”, dicta el portal web de la Secretaría Nacional de Cultura. Esta costumbre fue trasladada a nuestro país y era disfrutada en una bella época todos los sábados; sin embargo, ¿dónde empezaron los sonidos?
El historiador Jorge Rubiani relata que ya a los guaraníes les encantaban los sonidos emitidos por vientos en instrumentos llegados de Europa. Esa admiración siguió latente en las descendencias: en la Época Colonial, el Dr. Francia compró muchos instrumentos para los niños. “El paraguayo tenía una natural inclinación hacia la música”, manifiesta.
Las retretas empiezan con Carlos Antonio López allá por 1850 con serenatas al pueblo consistentes en bandas de música que se movilizaban en caballos. Ya en tiempos de guerra, los músicos tuvieron un rol protagónico. Rubiani recuerda que en la Batalla de Tuyutí, al escuchar los soldados las bandas que estaban detrás de las líneas, se emocionaban y gritaban “¡piiipu!”, lo que asustó e hizo retroceder a los aliados. La música les salvó la vida.
Durante el periodo bélico, las autoridades entretenían a la población con bandas de música que recorrían todas las localidades. También las retretas se hacían para que el pueblo no tenga miedo al estamento armado. “Gracias a este procedimiento el pueblo tuvo acceso a un repertorio de primer nivel”, resalta el historiador.
Rubiani fue director de Cultura de la Municipalidad de Asunción en 1997. Ese tiempo le bastó para instalar en Asunción algo que sus barrios no olvidarían: retretas cada sábado. Desde niños hasta gente muy mayor disfrutaba un espectáculo de gran calidad. Iba en zapatillas, durante una pausa en sus quehaceres de la tarde.
Esta “costumbre de un año” fue perdida entre cambio de autoridades y las plazas nuevamente quedaron en silencio.
Están en el Norte
“Ahora realmente estamos enfocados en el Norte del país. Tenemos un programa que se está desarrollando”, comentó el Cnel. Félix Aranda, director de Comunicación Social de las Fuerzas Militares. Agregó que de igual manera se hace cada año un cronograma de retretas en la Capital.
San Pedro, Amambay y Concepción son los departamentos más visitados por las bandas musicales, para realizar un servicio a la comunidad. Amenizar las fiestas patronales y los festejos oficiales de cada localidad, forma parte de la nueva agenda.
“Históricamente las bandas de músicos apoyaron y están en constante coordinación con las ciudades”, manifestó.
Por su parte, el actual director municipal de Cultura Vicente Morales comentó que las retretas son actividades muy “lejanas”, pero que en los actos oficiales aún se disfruta de las bandas de la Policía Nacional. Ahora se tienen actividades como la “Palmeada musical”, que se realiza los sábados en la tradicional calle Palma. Actúa todo tipo de artistas: academias de danza, bandas de rock y músicos.
Por ahora, la Municipalidad asuncena no prevé reavivar las retretas, que forman parte de la historia paraguaya. “Es casi una obligación nuestra, de las autoridades, porque es un capital que estamos desperdiciando. Las bandas militares son un estamento musical de alta jerarquía que no pueden quedar mudas”, finalizó Jorge Rubiani.