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Este fenómeno de la floración de los lapachos en vísperas del ingreso del invierno es algo típico.
El ingeniero agrónomo Germán González Zalema explica que típicamente ocurre la floración, desde finales de abril incluso, de la especie de lapacho conocida como tajy pytã.
“Este lapacho tiene las hojas grandes con borde liso, y corteza de tronco liso. Son las que vemos por la ciudad y florecen en grupos. Esta especie puede florecer a fines de abril con los primeros fríos y varias veces al año. El frío hace que los colores sean más intensos”, explica.
Luego en agosto florece la especie de lapacho que se conocer como tajy hûu. “Las hojas de este lapacho son pequeñas y de borde aserrado, y su tronco es rugoso y agrietado. Florecen una sola vez, normalmente en agosto, dependen del clima y la duración de la luz solar”, dijo.
La floración de los lapachos puede tener varios motivos para presentarse en distintas fechas, con mayor o menor cantidad de flores y tonalidades, apunta el González Zalema.
Esta maravilla que regala la naturaleza actualmente está en pleno esplendor, para apreciarla y admirarla.