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Lo primero que Edgar pensó fue en el suicidio, pues imaginó que no quería seguir viviendo con semejante enfermedad a cuestas. Lo peor se vino después, cuando a su esposa también le pidieron que se someta al estudio. Ella resultó ser positiva.
Si bien en algún momento Edgar se separó de la madre de sus tres hijos, la enfermedad volvió a unirlos y ahora luchan juntos contra la tormenta que representa convivir con el virus del sida.
Edgar pudo salir de ese momento difícil, a pesar de sufrir una embolia cerebral de la que también se recuperó por completo, y hoy brinda charlas educativas y testimoniales en las instituciones educativas.
Edgar es padre de César (12), Guadalupe (11) y Patricia (6), quienes ni siquiera saben lo que sus padres padecen, pero tampoco escaparon al estudio de test de Elisa, lo que felizmente ha dado negativo.
"Yo entré en depresión, pero con la ayuda de mi familia y sobre todo de mi padre, don Doroteo Ramírez, pude salir de esa situación y ahora tengo muchas ganas de vivir y servir a los demás", apuntó nuestro entrevistado al tiempo de recordar que Papá Noel le había dado su regalo hace tres años, cuando se enteró que tenía el virus mortal.
POR RELACIONES SEXUALES
El contagio se produjo por medio de relaciones sexuales. "Era promiscuo, no niego que tenía muchas novias, porque me iba frecuentemente por el interior del país con la discoteca, donde yo trabajaba; nunca supe quién me contagió ni tampoco a cuántas más habré contagiado", subrayó el joven.
Más adelante comentó que acudió al Programa Nacional de Control del Sida, ubicado sobre la avenida Venezuela, donde encontró asistencia sicológica con la licenciada Liliana Giménez, quien lo ayudó bastante para superar todas las incertidumbres que rodeaban su mente.
También consiguió medicamentos que son proveídos por el citado programa mensualmente.
"No me descuido de las enfermedades oportunistas, porque en el lapso de estos tres años caí cinco veces en cama, me interné en el Instituto de Medicina Tropical, donde está el pabellón para los infectados con 14 camas", acotó Ramírez.
MENSAJE
Edgar tiene ahora una misión: expandir su experiencia y a la vez instar a los jóvenes a que lleven una vida sexual tranquila, que dejen de lado la promiscuidad, "que no sean desordenados, porque uno siempre dice: a mí no me tocará, pero mantener relaciones con varias personas sin el debido cuidado es el principal requisito para adquirir el VIH. Usen preservativo, pues a estas alturas es el único método de prevención, además de mantener una pareja estable".
Las personas o las instituciones que requieran de su concurso para dar charlas educativas y testimoniales pueden llamar al teléfono (0991) 200-418.
El virus del sida cambió la vida de Edgar y la de toda su familia. Aunque en otros hogares los enfermos son marginados, incluso, abandonados, él pudo encontrar todo el apoyo que se necesita en estos casos.
LOS NÚMEROS DEL MAL
* El Programa Nacional de Control del Sida (PRONASIDA) estima que existen entre 15.000 y 17.000 paraguayos con el VIH/Sida.
* Hasta setiembre de 2005 se han registrado 2981 de VIH positivos y 1917 casos de sida en Paraguay.
* En la actualidad, por cada 2 hombres infectados se diagnostica 1 mujer en Paraguay.
* Hasta la fecha el Programa de Control del Sida controla a 200 niños con VIH, de los cuales 85 están bajo tratamiento antirretroviral.
* El 37% (719) casos del total acumulado se registran como fallecidos hasta setiembre de 2005.
* La tasa de incidencia anual de casos de VIH/Sida fue de 2,35 por 100.000 habitantes en el 2004.
* La mayor proporción de personas afectadas tiene entre 25 y 49 años (81.1%).
* El grupo etareo con mayor frecuencia de casos es el de 30 a 34 años.
* El número de personas infectada en América Latina con el virus del VIH, causante del sida, creció 1,8 millones en el 2005, según informe publicado el lunes por el Programa conjunto de las Naciones Unidas sobre el VIH/Sida (ONUSIDA) y la Organización Mundial de la Salud (OMS).
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