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Con el afán de volver a dar vida al microcentro capitalino y revivir la otrora tradición de “palmear”, la Municipalidad implementó hace dos años atrás el plan piloto “Palma peatonal”, que comenzó tímidamente y se extendió de octubre a diciembre de 2013, a instancias de una propuesta presentada entonces por el concejal municipal Félix Ayala.
A mediados de 2014 se ensancharon veredas y se prohibió la circulación de vehículos sobre la arteria. Un año después, la Comuna mandó pintar la calzada en dos tramos, de Independencia Nacional a Chile. Finalmente, con el objetivo de que el concepto “Palma peatonal” se materializara y la presencia de personas aumentara, se desarrollaron actividades artísticas, como festivales musicales, de baile, teatro callejero y otros, a través de la Dirección de Cultura. Hasta ese momento, la propuesta municipal se mantenía en el marco de lo interesante y atrayente.
Mercado popular
Sin embargo, a la par de las actividades artísticas, creció el comercio de todo tipo de artículos, incluidos los de contrabando y las falsificaciones. El concepto de Palma peatonal se distorsionó por completo hasta tal punto que los miembros de la Asociación de Comerciantes y Empresarios del Centro Histórico de Asunción (Acecha) exigieron el levantamiento inmediato del plan.
Aseguraron que la peatonalización de calle Palma les trajo pérdidas económicas y que fomentó la venta de productos falsificados por parte de mesiteros informales.
Teresa Stipanovich, comerciante de la zona, señaló “Espero que la Municipalidad tome cartas en el asunto, eliminando las dos peatonales que solamente sirven para aglomerar vendedores informales con mercaderías usadas y de contrabando”.
Ante las quejas de los comerciantes y visitantes del sector en su perfil de Facebook, la concejala Pepa Kostianovsky (PEN) posteó que “el Ministerio de Industria y Comercio (MIC) y la Intendencia son responsables de que Palma se transformara en un cambalache y tenderete de ropa usada, traída en fardos de cualquier parte y en contravención a las leyes sanitarias”.
Denunció igualmente que “el director de Ventas Callejeras, un tal Víctor López, no solo desplazó a los vendedores de artesanía, que por convenio están instalados en la Plaza Juan E.O’Leary, para que se instalen con esta mercadería absolutamente ilegal, sino que también extendió la venta de trapos viejos y sucios a lo largo de toda Palma peatonal”.
“El MIC ni se dio por enterado. Toda esa mercadería debe ser decomisada en una acción conjunta e inmediata del MIC, la Fiscalía de Delitos Económicos y la Policía Nacional”, señaló al tiempo de acusar al abogado Víctor López de “cómplice de la venta de mercaderías de contrabando y falsificada”.
Sobre los artesanos desplazados, dijo que la Junta Municipal emitió el miércoles pasado una resolución ordenando la restitución de la plaza a los artesanos.
Intervención conjunta
Por su parte, el abogado Víctor López, director de la Policía Municipal de Vigilancia de la Comuna capitalina, reconoció que reciben presión de parte de las distintas asociaciones de feriantes para obtener los permisos, “bajo la justificación de la pobreza y una gran necesidad de trabajar para llevar el sustento a sus familias”.
Dijo que, ante los hechos, la Comuna delineó acciones que ahora permite a los feriantes exponer y vender sus productos un día a la semana. “Controlar si lo que venden es legal o ilegal escapa de nuestra competencia. Eso debe fiscalizar el Ministerio de Industria y Comercio (MIC). Aún así, nosotros ya hemos solicitado en varias ocasiones la intervención de esa cartera de Estado. Incluso le planteamos intervenciones conjuntas, pero la única vez que logramos hacerlo llamativamente la información sobre el procedimiento se filtró y fueron pocos los ilegales encontrados en flagrancia”, contó López.
Dijo también que existe la promesa por parte del Ministerio del Interior de apoyar los procedimientos municipales en los casos de desocupación de puestos ilegales o no autorizados en la vía pública de Asunción, pero que tampoco aún se pudo concretar.
Sobre el desplazamiento de los artesanos de la plaza a las veredas de calle Palma, alegó que es temporal mientras terminan las obras de revitalización de dicha área de esparcimiento.