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Elena Rojas, la madre de Jesús, comentó que desde que el niño fue dado de alta, están viviendo en el albergue para pacientes oncológicos del Hospital General Pediátrico Niños de Acosta Ñu.
“Los doctores nos informaron que el terreno de mi casa en el barrio Santísima Trinidad no presenta las condiciones aptas para su recuperación porque es un ambiente húmedo y hay dos laboratorios farmacéuticos en las inmediaciones”, expresó. La casa, además era bastante precaria. Indicó que el jueves concretarían la mudanza.
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El director técnico de la Senavitat, Daniel Emeri, detalló que los materiales utilizados para la construcción de la vivienda no son los convencionales como ladrillo y cemento.
“La cualidad más destacable es la facilidad del montaje y trasporte. La fachada y tabiques interiores están construidos con paneles tipo sándwich, compuestas de acero galvanizadas y prelacadas”, explicó. Las uniones entre paneles del tejado disponen de machimbrado especial.
Aseguró que la casa es resistente y segura, y reúne las condiciones para mantener un ambiente saludable.
La directora de Gestión Social, Lucía Giovine, informó que la Senavitat, la empresa constructora Arpa y los padres del paciente firmarán un convenio para que la familia resida en la casa, ubicada en Limpio, por un lapso de seis meses. En este tiempo se realizarán los trámites para concretar la compra del terreno o encontrar otro lugar apto.
El director técnico de la Senavitat, Daniel Emeri, señaló que están en conversaciones con la empresa para adquirir la casa, cuyo precio oscila los 15.000 dólares.