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El Ave María, de Schubert, con una afinación perfecta a cuatro voces fue el recibimiento del Coro de la Asociación de Ciegos del Paraguay. Siguieron otros repertorios coreados en italiano, latín, francés, inglés, castellano y guaraní. Nos deleitamos al llegar al local de la asociación, ubicada en Carreras Saguier 730, barrio Vista Alegre. Los integrantes del coro integrado por 27 miembros ensayaban para presentarse en Loma Plata y Filadelfia, Chaco paraguayo.
El director del coro, Eladio Agüero, interrumpió el ensayo y nos contó que cantan música religiosa, popular, paraguaya e internacional. Y que hace 10 años está al frente del grupo. Ensayan martes, miércoles y viernes.
Eladio hace cinco años está casado. Su esposa espera un hijo. Ella es de nacionalidad uruguaya, Laura Olivera. Eladio nos contó que es profesor superior de canto, recibido. Integró el Coro del Ateneo Paraguayo y del Centre Catalá.
“Tengo poca visión por problemas de catarata congénita. Uso lupa para leer y tengo mucha dificultad para abordar el colectivo.
“Es importante la capacitación para el empleo, conseguir un trabajo y tener accesibilidad en los diferentes ámbitos donde nos toque desempeñarnos. En el trabajo hace falta contar con computadoras y teléfonos audibles”, dijo.
Audioteca
Al ingresar al local, también pudimos conocer un estudio de grabación, al que denominan Cinemateca y Audioteca del Libro Hablado y autodescripción de películas. Nos atendió Derlis Méndez, que hace 17 años trabaja produciendo formatos MP3, servicio gratuito para socios de la entidad.
“Yo soy técnico en sonido recibido. Contamos con unos 8.000 títulos de libro hablado de historia, novelas, ficción, de autoayuda en la Audioteca. Algunos de los socios traen su pendrive o le prestamos en CD”, resaltó.
Eladio nos hizo escuchar La guerra de la sed, historia de la Guerra del Chaco, de varios escritores paraguayos y extranjeros. Están musicalizados y tienen efectos especiales que constituyen una novedad no sólo para el invidente, sino también para las personas que no les gusta forzar la vista, leyendo letras pequeñas. Los socios prestan gratuitamente.
El abogado Nelson Segovia (38), vicepresidente de la asociación conformada en 1985, nos dijo que trabaja hace 10 años como asesor jurídico del Ministerio de Agricultura y Ganadería, gracias a un asistente.
Nelson está casado con la Lic. Nilsa Mendoza, también no vidente que trabaja en el IPS, y tienen dos hijos.
Si bien logró formar su familia y tiene un trabajo, afirma que la principal dificultad que debe vencer cada día son los prejuicios en relación a la discapacidad visual que tiene.
“Hace falta la adecuación tecnológica, programas de lector de pantalla para computadora, para realizar mi trabajo sin un asistente. Necesito un escáner para texto que me permita digitalizar los documentos para poder revisar con la computadora hablada”, dijo.
Lamentó que el Estado haya recortado a la mitad del presupuesto de la Asociación sin haber hecho un análisis previo de los importantes servicios educativos, culturales, deportivos y de preparación para la vida que la asociación brinda a los invidentes.
Asociación
La principal actividad a la que la Asociación está abocada es el cumplimiento de la Ley 3365/07 de la gratuidad del pasaje en el transporte público, con un acompañante, en todo el territorio nacional. Esto permitió la expansión masiva de las persona ciegas a nivel país, para el acceso a la educación, la recreación, y todo tipo de servicios. Así precisó José Maldonado, presidente de la Asociación de Ciegos del Paraguay, que es casado, padre de tres hijos y hace 10 años trabaja en la Municipalidad de Asunción.
Añadió que el acceso al empleo sigue siendo prioridad de lucha en la institución porque es muy incipiente en el país, y va de la mano de la formación.
“Alrededor de 100 personas no videntes estamos trabajando en sectores públicos bajo el amparo de la Ley 3585”, indicó.
Ante esta realidad, según Maldonado también han incorporado a unas 70 personas en espacios específicos que han creado como ser en lo cultural, deportivo, el coro polifónico de ciegos, que perciben sus salarios, en la asociación.
“Con la asociación suplimos las carencias que el Estado no atiende en el sector. Por eso nos preocupa el recorte de G. 1.700.000.000 a G. 850.000.000 que nos hizo Hacienda”, resaltó y dijo que en el interior del país tienen seis centros de formación integral para invidentes.
Destacó que la Selección Paraguaya de Fútbol de Ciegos este año jugará el mundial a realizarse en noviembre próximo, en el Japón. Resaltó además la cinemateca con que cuentan.
Significó que ya han incorporado 150 películas grabadas con autodescripción. Consiste en describir todo el entorno de la película donde no hay diálogo. Todo aquello que no llega a través de la vista, el locutor describe las acciones, movimiento, estados de ánimo y todo lo necesario para que el usuario ciego pueda disfrutar a plenitud la película.
“Los no videntes tenemos que tener mucha fortaleza espiritual para abrirnos paso en la vida. Porque el mundo en el que vivimos está hecho solo para los videntes. No es fácil, pero es posible. Por eso necesitamos que el Estado nos apoye en los emprendimientos para mejorar la calidad de vida del sector”, concluyó José Maldonado.
eolmedo@abc.com.py