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El obispo del Vicariato del Chaco Paraguayo instó a erradicar tres grandes flagelos que impiden avanzar como nación: la ignorancia, el miedo y la corrupción. En ese sentido el prelado señaló que la ignorancia que no solo nos lleva a la pobreza sino también a la miseria. Una ignorancia no solamente en el ámbito educativo sino también en la salud, moral y espiritual. Subrayó que si no se logra vencer este flagelo se están hipotecando el presente y el futuro de la nación.
Especificó que como ciudadanía se debe exigir una mayor inversión en educación a las autoridades nacionales. Siguió diciendo que “el segundo flagelo que se debe superar y sacar de nuestras vidas es el miedo”. El miedo que no permite ser libres sino esclavos. Mons. Escobar manifestó que “todavía persisten en nuestra sociedad vestigios de ese miedo que nos tocó vivir como pueblo en tiempos de la dictadura”.
El tercer flagelo es la corrupción que se da en los distintos ámbitos de nuestra sociedad y en distintos colores incluso.
Mons Escobar expresó que “no nos podemos quedar indiferentes ante ciertas situaciones y acontecimientos que nos tocan vivir. Las obras de misericordia pueden ayudar a superar la corrupción”.
Sostuvo que Dios confía en los jóvenes, porque está convencido de que de ellos dependerá el cambio. Ya lo demostraron en la primavera universitaria, que ha traído cambios a grandes sectores de la sociedad. “Aunque la justicia algunas veces es manipulada al mejor postor”, acotó.
El Santo Padre instó a los jóvenes en la Costanera a ser libres para poder ir hacia adelante, y ese sentido sostuvo que solamente el joven que se siente libre es capaz de comprometerse y hacer cambios en su vida y en la vida de los demás.