Cargando...
Así lo pudieron constatar ayer a la mañana periodistas de nuestro diario. Siete máquinas tragamonedas estaban instalados en los locales 37 y 38 del bloque conocido con el nombre de UAN (Unión Agrícola Nacional). Varias cajas de cervezas en la entrada solapaban el verdadero negocio dentro del local.
Cerca de las 13:00, tras la publicación del caso en nuestro diario digital, la Dirección de Juegos de Azar de la Comuna, a cargo de Bobb Richard Pérez Ordone, intervino el local y se incautó de los aparatos.
El salón de juego ilegal tenía como fachada la venta de bebidas alcohólicas, lo que tampoco está permitido en ese bloque puesto que es para productores agrícolas. Justamente frente al local estaba funcionando el año pasado otras máquinas tragamonedas.
No sabemos el nombre de la persona que alquila los dos locales porque ni uno de los jefes administrativos ni el interventor del Mercado, Alex Duré, se encontraban en su oficina ayer para proporcionar los datos.
Ni siquiera los funcionarios de informática se encontraban, curiosamente.
Esta es solo una de las muestras de cómo la ilegalidad sigue campeando dentro del Mercado de Abasto, cuya administración se intervino por 120 días, desde el 20 de octubre del año pasado. Expiró el plazo y Duré no cambió absolutamente nada de todo lo que se denunció después del incendio del Bloque C. Ni siquiera sabemos de algún informe que haya presentado.