Hogar “Albino Luis” para niños especiales, una obra de amor

El Hogar Albino Luis cuida a niños deficientes físicos y mentales, desamparados y abandonados por sus familiares, y sin recursos económicos. Les brinda una atención integral en un ambiente familiar. Así, ellos aprenden a ser felices. El hogar depende de la fundación “Lidia Barreto de Portillo”.

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Este mes de setiembre, Albino Luis cumplirá 47 años, el hijo especial de doña Lidia Barreto de Portillo (fallecida el 27 de julio del 2003).

Ella fue una mujer de indescriptible sensibilidad y vocación de servicio, y asumió el compromiso con personas que padecen deficiencia mental severa. El Hogar Albino Luis depende de la Fundación Lidia Barreto de Portillo, y está situado en Souza N° 4850 e/Monseñor Bogarín y Tte. Zotti. (Villa Morra). Este se solventa con la ayuda de personas particulares y empresas que, sensibilizados por las necesidades de estos chicos, aportan recursos invalorables para el sostenimiento de “Albino Luis”. “Sin embargo, cubrir las demandas supone una actividad de todos los días de captar gente solidaria”, dice María Griselda Rojas Abente, directora del hogar.

El ambiente es cálido, ordenado y limpio, y cada niño o niña tiene sus actividades básicas, según su estado de salud. Son higienizados, les dan los alimentos y medicamentos, y hacen terapia de recuperación.

Los que quieren ayudar, pueden hacerlo donando alimentos no perecederos, y en noviembre y diciembre pueden colaborar comprando las tarjetas navideñas. Se pueden solidarizar con su oración, haciéndose socio cooperador, padrinos, tíos, primos afectivos, con su aporte voluntario dedicando su tiempo libre ayudando a los niños.
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