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Acotó que es difícil decirles a sus colegas que no viajen, considerando que en Italia se les ofrece por su trabajo 2.000 euros y en los Estados Unidos 3.000 dólares con residencia y con posibilidades de llevarles a los familiares.
"Actualmente, tenemos trabajando en Italia unos 400 enfermeros profesionales, todos graduados en la facultad con una licenciatura, especializados en terapia intensiva, emergencias médicas, en salud mental y otro grupo grande se prepara para viajar", significó a la vez de agregar que en el Paraguay se cuenta con 4.000 licenciadas en enfermería y hay un déficit muy grande de terapia para niños y adultos y los pocos profesionales especialistas están migrando a otro país.
"Tenemos varias terapias cerradas, si se abriera el Hospital San Pablo, la terapia en el Hospital de Luque, en el Materno Infantil de San Lorenzo faltarían recursos humanos que lleva entre dos a tres años de especialización", indicó.
Chávez dijo que es preocupación del gremio que la mayoría de las enfermeras que migran tienen alrededor de 30 a 35 años. Estos profesionales dentro de unos 10 a 15 años regresarán al Paraguay sin posibilidades de trabajo, sin jubilación, sin seguro social y eso va a generar una inestabilidad social.
"Tenemos en el país 1,9 por cada 10.000 habitantes. Hay siete auxiliares por cada 10.000 y los vecinos del Mercosur tienen siete enfermeras por cada 10.000 habitantes. Eso significa que la escasez de personal irá en detrimento de la calidad de la atención", manifestó la sindicalista.
La profesional lamentó que en nuestro país no exista para las enfermeras incentivo por trabajo nocturno, por año de antigüedad, por título ni por mérito.
"Acá (en Clínicas) una enfermera que entra se puede jubilar después de 30 años con el mismo salario de cuando ingresó", apuntó, a la vez de añadir que en el país hay muchas enfermeras que no se incorporan al mercado laboral. Mientras, hijos de ministros de la Corte Suprema de Justicia y de consejeros de entes del Estado trabajan con salarios de hasta G. 5 millones.
Resaltó que el Tribunal Superior de Justicia Electoral cuenta con 50% más de contratados que el Ministerio de Salud Pública. Por todo lo mencionado, significó que las autoridades sanitarias, así como las de los poderes Ejecutivo y Legislativo, deben tomar en serio la migración de enfermeros y establecer un política antimigratoria, ofreciéndoles mejores condiciones de trabajo, un salario digno, e insertarles a los nuevos profesionales recibidos en las instituciones de salud porque el pueblo les necesita.
elvira@abc.com.py