Cargando...
“Es una situación injusta. Empecé en el magisterio en 1955 y desde entonces se intentó ingresar al régimen jubilatorio, sin éxito. Que IPS pretenda que se le pague el subsidio por 25 años de los que nos vamos a jubilar no puede ser, porque si morimos en el camino ese dinero se va a quedar para el IPS. Además, si no nos jubilan se genera una cadena de perjudicados. Los colegios tendrán que indemnizarnos, lo que implica aumento de cuotas, además de la privación del derecho de los docentes más jóvenes a tener trabajo”, indicó.