Día nacional de la sonrisa, ayer

Con apoyo ciudadano y gran colaboración del voluntariado, fue ayer el “Día nacional de la sonrisa”, colecta de la Fundación Sonrisa, en las principales calles de Asunción, San Lorenzo, Fernando de la Mora, Luque, Caacupé y Villarrica. El objetivo fue recaudar fondos para cumplir el sueño de miles de niños paraguayos, que aún esperan lucir una sonrisa renovada, dado que nacieron con labio fisurado o paladar hendido.

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A tempranas horas de ayer los voluntarios comenzaron su tarea durante la colecta “Día nacional de la sonrisa”. Se fueron ubicando en las principales esquinas, distribuyéndose durante dos grupos. Uno trabajó desde las 7:30 hasta las 12:30 y el siguiente continuó la tarea desde las 12:30 hasta las 17:30 aproximadamente.

Todo con el fin de lograr que sea un éxito la iniciativa solidaria impulsada por la Fundación Operación Sonrisa Paraguay, a los efectos de apoyar a niños que aún aguardan lucir una sonrisa renovada, dado que nacieron con labio fisurado o paladar hendido, y requieren un importante tratamiento, con cirugías y significativo cuidado posoperatorio.

Acerca de su rol como voluntarios socializaron sus experiencias Juan José Troncoso y Guadalupe Parcerisa, ambos del colegio San José, 2° curso de Ciencias Básicas, y 9° Grado, respectivamente. Juan José Troncoso es voluntario por sexta vez y cumplió ayer el rol de coordinador de un grupo de jóvenes. “Es una experiencia única. Hay de todo. Algunos quizá no te hacen caso, pero otros te reciben con una sonrisa, más al conocer la obra de Operación Sonrisa. También nosotros explicamos de qué se trata: una organización que ayuda a niños con labio fisurado y paladar hendido, para que puedan ser operados, pues eso trae muchas dificultades, para comer, para hablar”, significó.

Y agregó: “Existe gente voluntaria, no solo nosotros, que colaboramos durante la colecta, sino médicos paraguayos y extranjeros que ayudan con su conocimiento y trabajo”, al tiempo de invitar: “Ojalá que todos puedan ser voluntarios alguna vez, porque en serio es una experiencia buenísima, algo que te queda en el corazón, al ver a los niños con su cara de felicidad luego de las cirugías. Todos están invitados a ser voluntarios en las diversas organizaciones de beneficencia, para ayudar a gente que realmente necesita”.

Guadalupe Parcerisa vivió ayer su primera experiencia como voluntaria, aunque ya colaboró durante otras actividades solidarias. “Como voluntaria me siento bien al ayudar a personas, porque una parte de mi día no es nada comparando con otras personas; hay gente que realmente ayuda, algunos solo para cumplir y otros con verdadero sentimiento. Han aportado G. 50.000 e incluso G. 100.000. Espero que mucha gente se motive a ser voluntaria”, concluyó.

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