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Los doctores Sckell de Duarte, Cabrera y Arbo denunciaron en nuestra redacción que como resultado de una persecución interna dentro de la Facultad de Medicina UNA ahora fueron destituidos de sus funciones como docentes y como responsables de algunas cátedras.
La doctora Cabrera señaló que forman parte del grupo de docentes de Medicina que desde el año pasado viene denunciando irregularidades en la gestión administrativa y académica en la facultad.
“No hubo respuesta favorable a nuestras denuncias y como resultado ahora nos destituyen”, se quejó la profesional.
Los docentes citados coincidieron en señalar que denunciaron la irregular gestión a través de la prensa y ante Contraloría General de la República, ante el Tribunal de Cuentas, además ante la Fiscalía, pero sin resultados favorables.
La doctora Cabrera mencionó que su destitución y la de su marido (Carlos Arbo) es por tomar examen en posgrado a una hija de ambos. Argumentó que durante el examen se apartó del sitio y que el documento final tenía que firmar como directora de posgrado.
El doctor Arbo criticó el lento proceso judicial. Presentaron una querella autónoma y lamentó que la jueza Alba González les haya dado fecha de juicio oral recién para octubre del 2015. El abogado de los mismos, Jorge Bogarín, pidió a la jueza adelantar el juicio, considerando la gravedad del caso.
Faltas gravísimas
El decano Peris señaló que no tienen nada que ver las denuncias que realizaron en su momento los docentes: “Todas fueron desestimadas en la fiscalía”, dijo.
Agregó que la destitución es porque “cometieron graves irregularidades en el posgrado”. La doctora Cabrera tomó examen a su marido y luego ambos tomaron examen a la hija. “Esto no está permitido y es falta”, señaló Peris. De la doctora Sckell dijo que tomó examen final a alumnos sin terminar el curso de posgrado.
“El resultado pasamos al Consejo Superior Universitario (CSU), que decidió por unanimidad la destitución, a excepción mía y de los demás representantes de Medicina, quienes nos abstuvimos”, dijo Peris.