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Hoy se trata de una institución que se encuentra en Potrero Guazú, Itauguá, con capacidad para 20 personas -están ahora 16-, con un cupo de 4 mujeres.
La institución brinda servicios a pacientes jóvenes y adultos, hombres y mujeres con trastornos mentales y con adicciones a sustancias sicoactivas, dentro de un ambiente de apoyo, comprensión y seguridad, según define Piñeiro.
Ante el concepto de la necesidad de la reinserción social del paciente con trastornos o enfermedades mentales, "Los Pilares" -explica Piñeiro- ofrece distintas modalidades de servicio: internación para casos de crisis y tratamiento, internación ambulatoria -por el día-, círculo social terapéutico, consultas externas.
"Mi hijo que padece de esquizofrenia fue el que me inspiró a realizar este emprendimiento. Ahora él está compensado, desarrolla algunas actividades en la clínica, como funcionario, y en este momento está de vacaciones", comenta Ana Sofía, quien viajó por varios países hasta que llegó a La Habana, Cuba, al Hospital Siquiátrico, donde conoció un sistema de trabajo que es el utilizado actualmente en "Los Pilares", adaptado a la realidad paraguaya.
Varias son las bases del programa emprendido, que incluyen concientización de la enfermedad (que el paciente conozca de qué se trata), plan sicosocial (en el futuro qué harán reinsertados en la sociedad), la familia (relación familiar, terapia de familia, entrenamiento para que conozca qué es la enfermedad, cómo actuar, cómo ayudar al paciente), importancia de la ingesta de medicamentos y ámbito espiritual (no una religión determinada, sino, por ejemplo, lecturas espirituales).
Más información, Teléfs. 522-584, (0971) 202-659, (0971) 206-812, (0981) 933-482, mail apineiro@rieder.net.py, página web www.pilares.org