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Durante la feria se podrá adquirir ropas, alimentos y electrodomésticos y la recaudación será destinada a la recuperación de los niños con síntomas de desnutrición.
Andrés Cho explicó que desde el 2008 están colaborando para evitar que los niños caigan en una desnutrición severa y queden afectados de por vida en su coeficiente intelectual.
Explicó que todos los productos que serán vendidos provienen de donaciones, y son muy requeridos. En cuanto a la metodología para la compra, indicó que las personas entran en grupos y tienen un determinado tiempo para adquirirlos, y así sucesivamente porque son numerosas las personas interesadas.
Gloria Yegros, de la Pastoral Social Arquidiocesana, resaltó la importancia del aporte de la comunidad coreana porque ayuda a los niños a recuperar su peso ideal y llevar una vida más sana.