Comuna asegura que edificios no destruirán paisaje de la Costanera

El Consorcio Bahía de Asunción presentó el pasado jueves un proyecto de desarrollo urbanístico para la zona de la Costanera, que contempla la construcción de edificios que podrían dejar atrás el bello paisaje que ofrece la ciudad capital. Desde la Comuna aseguran que las grandes estructuras se elevarán en forma espaciada y respetando el área verde ubicada a ambos costados de la avenida.

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El arquitecto Luis Villalba, director de Área Urbana de la Municipalidad de Asunción, aseguró que los edificios que se proyectan en la Costanera no destruirán el paisaje de la capital que se observa desde la bahía, ya que frente al casco histórico existe un área verde, que se extiende desde la calle Colón hasta Independencia Nacional. Aseguró que los edificios se construirán desde Independencia Nacional hacia General Santos, de manera a no modificar la visibilidad del Palacio de Gobierno, el Congreso y otras estructuras que forman parte de la historia de Asunción.

Señaló que el proyecto de desarrollo urbano de la Franja Costera, presentado por el Consorcio Bahía de Asunción, será implementado de forma gradual, con la construcción de edificios comerciales, pasando al complejo habitacional, de manera a absorber el pasivo social existente en la zona de la Costanera.

El Consorcio Bahía de Asunción está integrado por Northbaires, Syasa (Argentina) y Gaudi SA (Paraguay).

Los nuevos edificios, siempre según el proyecto, serán conectados a una colectora de la Essap de manera a que las aguas residuales desemboquen en plantas de tratamiento independientes.

Igualmente, según explicó Villalba, se proyecta que el cableado -tanto de la Essap como de la Copaco- sea totalmente subterráneo e inclusive esté bajo tierra la línea de alta tensión que pasa por la Costanera.

Sostiene que el proyecto contempla la construcción inicial de dos edificios. En total serán 25, a medida que se vaya cumpliendo con el cronograma de desarrollo urbano del área, que incluye al inicio la creación de una zona de amortiguamiento para el Banco San Miguel, considerada como área silvestre protegida.

Expresó que el sistema de construcción que se contempla es espaciado, repartiendo los edificios en nueve grandes lotes de manera a no perder la vista al río, integrando la visual de la zona al medio ambiente.

Villalba sostuvo que el proyecto se inicia con objetivos realizables de manera a ir generando un dinamismo que absorba el pasivo social, con la creación de barrios de media densidad que tampoco, según sostuvo, afectarán a la visibilidad del casco histórico de la ciudad.

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