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El hecho se dio luego de la mediación realizada por el intendente asunceno, Mario Ferreiro, quien ayudó a conseguir que su expediente llegue al tribunal del trabajo.
Los choferes se habían instalado allí para exigir la reposición de los despedidos por formar un sindicato.
Antes de la reunión hubo incidentes cuando el asesor del ministerio, Miguel Díaz, se acercó a los trabajadores en la vía pública para intentar leer la orden de desalojo. Los choferes lo abuchearon hasta que se vio obligado a retirarse.
Otro grupo de choferes, de la Línea 51, aún permanece en el sitio. Su pedido es ser recontratados por la empresa San Isidro.
El ministerio criticó
En su página web el Ministerio de Trabajo expresó su descontento porque “el despeje debe ser total, no a medias, según la Resolución Municipal N° 596/2016”. Criticó que el intendente haya tardado dos meses y medio para hacerla cumplir y al final sea parcialmente.