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La invitación fue igualmente por redes sociales, con el hashtag #DiaDesigual, con la invitación de que todas las personas se unan a la celebración del Día Mundial del Síndrome de Down.
Así lo resaltó Raúl Montiel, presidente, con su esposa María José Cabezudo, de la Fundación Saraki, desde donde detalló realidades y mitos acerca de las personas portadoras de Trisomía 21.
Detalló que mientras se piensa que estos niños son hijos de padres mayores, en realidad el 80% nace de madres menores de 35 años de edad. Sin embargo la incidencia de nacimientos de niños con síndrome de Down sí aumenta con la edad de la mujer.
Se cree también que deben ser matriculados en programas de educación especial o en clases separadas mientras que actualmente son incluidos en salones de clase de educación regular en escuelas a través del país, lo cual está previsto en la Ley 5136 de educación inclusiva, con el objetivo de inclusión total, en la vida social y educativa de la comunidad.
Además, existe la opinión de que no son empleables, en tanto que las empresas están buscando a los adultos jóvenes con síndrome de Down para una variedad de posiciones. “Ellos están siendo empleados en oficinas pequeñas y medianas, por ejemplo, en los bancos, corporaciones, hoteles y restaurantes. Ellos trabajan también en las industrias de música y espectáculo, en posiciones administrativas y en la industria de las computadoras. Las personas con síndrome de Down traen a sus trabajos su entusiasmo, confianza, y dedicación”, aseveró Montiel.
Y aunque muchas personas opinen que ellos siempre se encuentran alegres, realmente tienen los mismos sentimientos como todas las personas. Responden a las expresiones positivas de amistad, se ofenden y se desconciertan con conductas desconsideradas, agregó.
Además, tienen citas, socializan y forman relaciones. Algunos se casan. Las mujeres con síndrome de Down pueden y tienen niños.