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El mismo superintendente de Salud, Dr. Domingo Mendoza, confirmó ayer que los auditores se constituyeron en el local que funciona sobre la Av. España 1077 casi Washington, donde presta el servicio de hemodiálisis a los pacientes de la previsional y de la cartera de Salud Pública.
“Esperamos primero que el Centro de Nefrología nos remitiera la lista de establecimientos que están prestando servicio de hemodiálisis en la capital e interior, porque vamos a investigar a todas las empresas. Existirían algunas que están operando sin la habilitación correspondiente”, señaló el Dr. Mendoza.
Agregó que “una vez concluido el trabajo de auditoría se tomarán las medidas. Las empresas que operan al margen de la ley y que cometen negligencia en el caso de la transmisión de enfermedades a pacientes recibirán sanciones administrativas, que sería el cierre del establecimiento, y penales, que ya corresponde al ámbito del Poder Judicial”.
El Consorcio Renal, que está en el ojo de la tormenta desde la semana pasada, presta servicio de hemodiálisis al IPS y a Salud desde 2009. En siete años facturó más de G. 60.000 millones a ambas instituciones públicas. Los contratos oscilan entre G. 3.000 y 10.000 millones.
En el caso del IPS, los contratos comenzaron con pequeños montos de G. 2.900 millones y luego fueron subiendo hasta superar los G. 10.000 millones.
Desde que se desató el escándalo del contagio de hepatitis C, ABC Color buscó al Dr. Dávalos Flores para que dé su versión sobre el contagio, pero nunca nos atendió pese a nuestra insistencia.
Según la denuncia, en su establecimiento, más de 30 pacientes del IPS fueron contagiados con hepatitis C y otra decena del Ministerio de Salud.
El Dr. Marcos Martínez, responsable del Centro Nacional de Nefrología, informó que el consorcio en cuestión posee cuatro salas de diálisis, de las cuales una no opera.