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El encuentro fue organizado por el Ministerio de Justicia y Trabajo en el hotel Chaco. Asistieron al evento la ministra Lorena Segovia, el viceministro Raúl Mongelós, el director del Trabajo, Raúl Rosa; Germán Ruiz de la Asociación Rural del Paraguay, representantes de la UIP, los sindicalistas Bernardo Rojas de la Central Unitaria de Trabajadores Auténtica (CUT-A), Francisco Brítez de la Confederación Paraguaya de Trabajadores (CPT), Aldo Snead de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT), entre otros.
La apertura estuvo a cargo de la ministra de Justicia y Trabajo, Lorena Segovia, quien destacó los temas que serán tratados. Al poco tiempo de dirigirse a los presentes, el viceministro Raúl Mongelós, fue interrumpido por Snead, quien pidió el retiro de la CUT-A por impulsar la expulsión de la CUT del seno de la Coordinadora de Centrales Sindicales en Río de Janeiro porque supuestamente apoyó el golpe contra Fernando Lugo. Agregó que si el actual gobierno es golpista, “les pido que se retiren de esta sala y que el gobierno le retire todas las representaciones porque no hubo golpe de estado, al contrario se restituyó la paz”, apuntó Snead.
Insistió que si la CUT-A tiene sangre en la cara no puede estar participando del foro.
La ministra intervino y aclaró que la naturaleza del encuentro es de diálogo y resaltó que todos los invitados fueron convocados a debatir y establecer una hoja de ruta en política salarial.
Rojas respondió a Snead y reiteró que la CUT-A no oculta su posición frente al Gobierno y agregó que no le extraña que Aldo Snead, conocido seccionalero, saque el tema en el encuentro. Molesto, Snead por el apelativo de seccionalero, intentó interrumpir el discurso de Rojas y se inició una agria discusión que desnudó la marcada división entre los trabajadores. Rojas acusó nuevamente de “seccionalero y stronista al servicio de la dictadura “Andate a la mierda”, dijo. Agregó que la CUT fue expulsado por su posición antipopular y antiobrera.
Para el sindicalista de la CUT-A, si se pretende un diálogo social, se debe partir del respeto al derecho de los trabajadores y en el gobierno de Federico Franco se ha echado a 2.500 trabajadores. Rojas fue interrumpido por la ministra Segovia, pero siguió acusando a Snead de seccionalero, a lo que Snead dijo que fue miembro del Mopoco y Rojas le retrucó: “fuiste un infiltrado”. La ministra pidió respeto a Rojas retomó su discurso y reiteró que en Paraguay hubo golpe parlamentario y se retiró y cuando salía, Snead, dijo que “Rojas era aportante mau del IPS”.
El ganadero Germán Ruiz lamentó el incidente e invitó apostar más que nunca por el diálogo. El encuentro culminó y proseguirá el próximo año hasta lograr las políticas para mejorar las condiciones laborales y salariales.