Urge aumentar inversión en niños

Las estadísticas nacionales señalan que 4 de cada 10 niños viven en pobreza extrema y aumentan los casos de abusos sexuales que dejan secuelas sicológicas de por vida. Es clave que el Estado considere “una inversión”, no un gasto, implementar programas sociales.

El rostro humano de las estadísticas debe evidenciarse en más programas sociales de nuestro país, en especial en  la  educación y en salud.
El rostro humano de las estadísticas debe evidenciarse en más programas sociales de nuestro país, en especial en la educación y en salud.Archivo, ABC Color

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Hoy se inicia con varias actividades la Semana de la Niñez y la Adolescencia, en coincidencia con la recordación de los 30 años de la Convención por los Derechos del Niño, ratificada por el Paraguay. En este marco, es propicio analizar el rostro humano de las estadísticas.

Al inicio de este año, el ministro de Hacienda, Benigno López, se mostró optimista ante el panorama económico que, dijo a los medios de prensa, es alentador. “El crecimiento a los niveles de 3,5% es un crecimiento adecuado para la situación en la cual vivimos. Nuestro potencial de crecimiento no pasa del 4,5%. Si todos los astros se alinean en un determinado año, llegaríamos a 5%”, enfatizó.

Conviene recordar al respecto, que el actual viceministro de Educación, Robert Cano, quien fue investigador de la ONG “Juntos por la Educación” en conferencias hace cuatro años, alertaba sobre el bono demográfico y la inmejorable oportunidad que el Paraguay tiene si invierte en el capital humano, porque el 80 por ciento de la población tiene menos de 30 años de edad. Y ambos sectores podrían pasar a formar parte de la Población Económicamente Activa.

Concluía: “El flagelo del hambre afecta potencialmente a 1 de cada 3 niños del Paraguay, que es una merma del 30 por ciento de la futura fuerza productiva nacional. Por eso es importante focalizar esfuerzos en la erradicación de la desnutrición infantil de nuestro país que tiene todas las condiciones para hacerlo.

En el Foro Paraguay 2030, en el Hotel del Paraguay, el 12 de marzo pasado, se dieron a conocer que 4 de cada 10 niños viven en situación de pobreza extrema, hecho que contrasta con la macroeconomía dada por el ministro de Hacienda Benigno López. Se suma a ello las denuncias de abuso sexual infantil, que aumentaron a 138 por ciento entre los años 2015 y 2017, que dejan graves secuelas de por vida en las víctimas.

Al respecto, la ministra de la Niñez y Adolescencia, Teresa Martínez, en reuniones con integrantes de la Comisión Nacional de Prevención y Atención Integral hacia la Niñez y Adolescencia del Paraguay, instó a los funcionarios a hacer un frente común a la problemática del abuso sexual, llevando adelante la campaña #TodosSomosResponsables.

Asimismo, dijo que es importante instalar las Consejerías Municipales por los Derechos del Niño, Niña y Adolescentes (Codeni), que fue creada con un carácter preventivo, y que de 254 municipios, solo el 10% la instalaron, incumpliendo así, la Ley 1680.

En este escenario nacional, datos de Unicef del último quinquenio daban cuenta que de cada 1.000 niños que nacen en el Paraguay, 19 mueren antes de alcanzar los 5 años, 16 antes de cumplir el primer año y 11 antes del primer mes de vida. Asimismo, 44,1% de los niños menores de 5 años sufre o está en riesgo de desnutrición. Y hacía hincapié en la importancia de una buena salud, nutrición, estimulación y protección en los primeros años de vida para facilitar el desarrollo pleno de las personas. Y ello permitirá a las generaciones futuras del país aumentar sus capacidades y potencial productivo.

Sin embargo, las estadísticas demuestra que poco o casi nada se ha avanzado con el compromiso asumido por el Estado al aprobar la Convención por los Derechos de la Niñez, sector que muy pronto tendrá en sus manos regir los destinos de este país, tan castigado por la corrupción, la desidia y la improvisación en el manejo de la cosa pública.

eolmedo@abc.com.py

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