Cargando...
Cuevas es defensor de Belén Whittingslow, exalumna de la Universidad Católica y quien habría sido víctima de presunto acoso sexual por parte de Cristian Kriskovich.
El abogado defensor asegura que Kriskovich miente groseramente al querer convencer a la opinión pública de que fue su exalumna Whittingslow quien en ningún momento colaboró con la justicia para que se lleve a cabo el peritaje de los celulares a fin de demostrar los mensajes supuestamente obscenos y depravados que el docente de la Católica le enviaba a su exalumna.
Mentira llegó hasta Diputados
El abogado Cuevas afirmó que “la mentira de Kriskovich llegó hasta la misma Cámara Baja donde el diputado Eusebio Alvarenga Martínez (PLRA) manifestó en plenaria que Whittingslow ‘jamás puso a disposición su celular para que se lleve a cabo el peritaje del mismo’”.
“Esto es falso de toda falsedad ya que quienes se opusieron tenazmente a la pericia técnica de los teléfonos fueron el mismo Kriskovich y sus abogados. Eso está explícitamente demostrado en el expediente de la causa en la Resolución N° 9/15 del 23 de abril de 2015 del Ministerio Público”, señaló Cuevas.
Afirmó que en dicha resolución el agente fiscal Rodolfo Fabián Centurión deja sin efecto resoluciones anteriores de la fiscala Nadine Portillo, quien dispuso la pericia informática de los celulares y resuelve desconvocar la audiencia de aceptación del perito nombrado y desconvocar el pedido a la señorita Belén Whittingslow de poner su celular a disposición del Departamento de Evidencias del Laboratorio Forense del Ministerio Público.
Kriskovich admitió los mensajes
El abogado Cuevas aseguró que el argumento esgrimido por el fiscal Centurión para desestimar la única prueba que tenía la presunta víctima de acoso sexual (que era el celular) fue de que el acusado Cristian Kriskovich admitió haber enviado los mensajes a su exalumna y que una pericia técnica sería “sobreabundante”, saliendo así a favor del argumento utilizado por el abogado Alfredo Montanaro, defensor del docente.
Montanaro presentó ante la Fiscalía, dos días antes de la resolución de Centurión, una nota en la que señala textualmente que “el resultado de la pericia técnica ordenada por la Fiscalía sería sobreabundante, porque la existencia de mensajes entre denunciante y denunciado no es objetado por nuestra parte...”.
“Posteriormente y con la ausencia de pruebas por falta de pericia de los celulares, a pedido expreso de la defensa de Kriskovich, la demanda por acoso sexual es desestimada por la Fiscalía y esto es muy bien utilizado por el representante de la Universidad Católica ante el Consejo de la Magistratura y el Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados para presentar una demanda por ‘daño moral’ contra Belén Whittingslow por nada menos que US$ 450.000”, subrayó Cuevas.