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Se trata de Óscar Benicio Irala López, de 19 años, quien registra varios arrestos por asaltos callejeros en la capital del departamento de Amambay.
El joven compatriota fue detenido en el aeropuerto de Suvarnabhumi, a 30 kilómetros de la capital, Bangkok.
Óscar Benicio partió con la droga desde nuestro país y dos horas después su vuelo hizo una primera escala en São Paulo, Brasil, tras 1.300 kilómetros de recorrido.
Después, el paraguayo viajó en avión otros 12.000 kilómetros, completados en 14 horas, hasta arribar a Dubái, en los Emiratos Árabes Unidos.
Desde el Medio Oriente, el paraguayo voló 5.000 kilómetros más, es decir, otras seis horas, hasta el país donde finalmente fue descubierto con la mercancía ilegal.
Según los datos, Tailandia era su última escala antes de llegar a Laos, situada solo a una hora de vuelo, siempre en Asia, donde tenía que entregar la cocaína que llevaba en su equipaje.
El paraguayo podría ser castigado con la pena de muerte por tratar de meter drogas a Tailandia o, si admite su culpabilidad, su castigo podría ser rebajado a cadena perpetua, es decir, prisión de por vida, conforme a los antecedentes de otros casos de extranjeros detenidos en dicho país bajo las mismas circunstancias que enfrenta hoy nuestro compatriota.