Cargando...
La finca fue rodeada y atacada por al menos una decena de matones, armados con escopetas y pistolas y que llegaron en una camioneta Chevrolet S10 negra.
Una de las víctimas del fulminante golpe fue el dueño del establecimiento, Julio César Ovelar (39 años), alias “Yoni”, quien hace cuatro años ya había sido arrestado por la Senad en el mismo lugar al ser señalado como un patrón de la producción de marihuana.
Los otros dos fallecidos fueron los capangas de “Yoni”, Carlos Augusto Lopes Soares (29) y Martín Estevao Da Silva Santos (22). Este último era un soldado de la facción brasileña Comando Vermelho y lo buscaban en Río de Janeiro por el asesinato de dos policías militares.
Tres horas después del triple homicidio, el rodado de los matones fue encontrado quemado al borde de un arroyo, en la colonia Curupay, a cinco kilómetros del lugar del hecho.
La colonia Cristino Potrero es un territorio controlado por el narco prófugo Felipe “Barón” Escurra, quien había sido capturado en 2016, liberado en 2017 y ahora buscado nuevamente.
De hecho, el ahora fallecido “Yoni” y el fugitivo “Barón” eran encarnizados competidores en el tráfico de marihuana hacia el mercado brasileño, por lo que no se descarta que este último haya ordenado el crimen.
Otra fuerte versión que surgió es que “Yoni” habría sido el mandante del homicidio de Cristian Ariel Godoy Lezcano (24), registrado el 26 de agosto pasado. El asesinado era sobrino del también capo prófugo Clemencio “Gringo” González.