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ÑEMBY (Higinio R. Ruiz Díaz, corresponsal).Carca de las 10:00, un semirremolque Volvo rojo con matrícula OBF, al mando de Merardo Barrios (48), perdió los frenos sobre la ruta Acceso Sur, poco antes de alcanzar la intersección de la calle 9 de Agosto, donde cinco vehículos estaban parados en espera de la luz verde del semáforo para continuar la marcha.
El camión de gran porte, propiedad de la empresa “Leguizamón Logística & Transporte”, llevaba más de 26.000 kilos de botellas de vidrio a la ciudad de Quilmes, Buenos Aires, Argentina, según los agentes de la comisaría 7ª Central de Ñemby.
De acuerdo a los testigos, primeramente el vehículo embistió contra un camión Mitsubishi Canter, con placa AEE 891, guiado por Elvio Amarilla (26), y este a su vez le rozó a un cisterna, que llegó a perder una gran cantidad de carburante sobre el pavimento. El Canter siguió avanzando, pasó al carril contrario y fue a parar contra la muralla del colegio Pablo Bogarín.
Sin frenos, el tractocamión siguió avanzando en la pendiente y se llevó por delante una camioneta Kia de color gris, con chapa AEF 120, guiado por Pablo Daniel Espínola Zayas (42), un automóvil Nissan, con matricula OAR 292, al mando de Eugenio Felipe Espínola (76) y un Land Rover de las Fuerzas Armadas.
En rodado militar era guiado por el vicesargento Ramón Ovelar, quien salió ileso, pese a que fue arrastrado más de 70 metros. En el mismo vehículo también viajaban el teniente coronel Félix Pastor Aranda (44) y el suboficial principal de comunicación Ricardo Morel Chamorro. Este último quedó atrapado entre los hierros retorcidos, pero tras una hora de intenso trabajo fue rescatado con vida por los bomberos voluntarios.
El militar sufrió lesiones en casi todo el cuerpo, porque el vehículo en que viajaba quedó con las ruedas hacia arriba. Fue derivado a Emergencias Médicas, donde recibió los primeros auxilios, y luego trasladado al Hospital Militar.
Un misionero identificado como José María Arena, quien distribuía volantes en la esquina, sufrió algunas heridas y también auxiliado por los bomberos.
“Todo fue tan rápido, unos 50 metros antes del semáforo me di cuenta de que los frenos no respondían y pasé al carril izquierdo para esquivar a un camión cisterna, porque si le chocaba explotaba y arrasé con los otros rodados”, expresó el conductor del camión Merardo Barrios, quien quedó demorado en la comisaría local.