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Los camaristas Arnulfo Arias y Carlos Ortiz Barrios argumentaron que el imputado debe ser enviado a la penitenciaría por la posibilidad de fuga y porque la estafa agravada es calificada como crimen, que no permite la concesión de medidas alternativas a la prisión.
Por su parte, el camarista Emiliano Rolón Fernández votó en minoría por mantener el arresto domiciliario, pero aclaró que el permiso que concedió el juez López para que el imputado pueda ausentarse de su casa para que cumpla sus labores de contador, desde las 6:00 a 20:00, de lunes a viernes, debe revocarse.
El juez López aún no dictó la orden de allanamiento y captura de Vallejos Giménez para hacer cumplir la prisión preventiva.
El fiscal Aldo Cantero y el querellante adhesivo Rodrigo Yódice, en representación de la empresa Envaco SA, apelaron el beneficio que concedió el juez López al imputado.
La fiscalía y la querella solicitaron la prisión preventiva del procesado, ante el peligro de fuga. Explicaron que Vallejos Giménez cuando se desempeñó como contador y encargado de comercio exterior de Envaco SA, endosó y cobró cheques que fueron efectivizados por la despachante de Aduanas Mirtha Barreto, y utilizando los privilegios de su cargo, modificó el sistema informático para ocultar la operación dolosa realizada.
A través de esta maniobra, Vallejos Giménez habría causado un perjuicio de G. 4.000 millones. Sin embargo, según auditorías recientes, el daño patrimonial a la empresa estaría rondando los G. 8.000 millones, indicó el abogado.