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Varias organizaciones criminales afincadas en la capital del Alto Paraná transportan toneladas de marihuana prensada ocultas entre cajas de cigarrillos de contrabando. Los narcotraficantes comenzaron a utilizar este medio, debido a que es uno de los más seguros, explicaron fuentes antidrogas.
El contrabando de cigarrillos ya cuenta con toda una estructura y se efectúa con la protección de las autoridades en la zona.
Con esta nueva modalidad los traficantes aseguran la llegada de sus productos a los mercados de consumo y también evitan el pago de coimas por el trayecto, recalcaron los oficiales.
El martes de noche, uno de los envíos fue interceptado por agentes del departamento Antinarcóticos de la oficina regional de Ciudad del Este. El cargamento de 100 kilos de marihuana prensada, distribuidos en 66 panes, iba a bordo de una furgoneta Toyota blanca, con matrícula XAT-671, que estaba al mando de Carlos Rafael Benítez (22).
El sospechoso declaró que debía trasladar los paquetes a uno de los puertos clandestinos ubicados en la zona de Presidente Franco. Allí debían acomodar la droga entre cargamentos de cigarrillos falsificados, cuyo destino era el vecinos país. Para evitar el decomiso de grandes cargamentos en los controles ruteros, los narcos optaron por mover pequeñas cantidades de la droga a bordo de vehículos, con los que llegan fácilmente a los puntos de embarques, ubicados en las zona de Puerto Indio, Remansito y San Miguel, confirmaron las fuentes.