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Según denuncias realizadas desde enero del año pasado, deambulan en la vía pública dos hermanitos de 2 años y de 5 meses, hijos de una joven de 20 años, que suele ser vista en estado de consumo de estupefacientes, pidiendo monedas.
Datos proporcionados por la madre a funcionarios del programa Abrazo de la Secretaría de la Niñez y la Adolescencia (SNNA) dan cuenta de que el padre de las criaturas es un vendedor ambulante, adicto al crack, del que se separó por violencia doméstica. La joven, que tiene un proceso por tenencia, reveló que también consumía, pero que dejó cuando se embarazó de su primer hijo. Dijo que no recibe “ni un guaraní” del padre de los niños, porque utiliza para mantener su vicio.
La madre de esta joven a su vez, tiene otros ocho hijos, el menor de 8 meses y el mayor, de 24 años. Esta mujer se instala en la avenida Eusebio Ayala, en su intersección con Choferes del Chaco o Charles de Gaulle, con su bebé en brazos, mientras su hijo de 10 años sube a los colectivos a cantar y pedir limosnas, pese a que recibe mensualmente de Abrazo 450.000 guaraníes y cesta de alimentos.
El drama de estas criaturas es acompañado de cerca por la ciudadanía, como se puede observar en el historial de denuncias recibidas en el Fono Ayuda 147 y en la comisaría 7ª.
Un reporte de la referida dependencia policial del 4 de febrero del año pasado, señala que la madre de 20 años exponía a sus hijos en la vía pública, uno de ellos de dos años de edad.
El 28 de mayo, una ciudadana denunció al 147 que un bebé de meses estaba tirado en el suelo, sin abrigo, y la madre estaba pidiendo limosnas en la avenida Eusebio Ayala. La denunciante precisó que la madre tenía apariencia de ser consumidora de estupefacientes. Tras la intervención del Centro de Referencia de Casos, se constató que se trataba de la madre de 20 años, quien rechazó la asistencia ofrecida.
Al día siguiente, en la comisaría 7ª se recibe la denuncia de un guardia de seguridad de un comercio ubicado en Eusebio Ayala y Charles de Gaulle, que informa sobre “varios niños en situación de calle, el menor de ellos tendría como 6 meses aproximadamente y el mayor como 8 años”, en compañía de los padres, que, según la denuncia, estarían drogados. El funcionario comentó que los chicos están a diario en las mismas condiciones y que en ocasiones anteriores denunció la situación a la misma comisaría.
Los agentes que acudieron al lugar encontraron solos en la calle a los hermanitos de 2 y 4 años y los llevaron hasta la comisaría, de donde fueron retirados por su madre y su abuela.
FALLO PENDIENTE
En setiembre del 2015, la Defensoría de la Niñez y la Adolescencia solicitó que se comisione a la Dirección de Protección Especial (Diproe) para buscar un abrigo para los niños y paralelamente, realizar un estudio sobre la posibilidad de insertarlos en la familia ampliada.
El 9 de octubre del mismo año, la jueza de la Niñez María Cristina Escobar dispuso que antes de dictar resolución, la defensoría presente pruebas suficientes sobre el maltrato denunciado, así como los certificados de nacimiento de los niños cuya explotación se denuncia.
Fotos: Carlos Shattebeck
rferre@abc.com.py