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El proyecto prevé subir hasta cinco años la sanción mínima, y a quince la máxima, a los adultos que abusan sexualmente de menores habiéndose producido coito, frente a los tres años de pena mínima que contempla el actual código penal.
Los senadores Blanca Fonseca, Mirta Gusinky, Hugo Richer y Arnoldo Wiens, son los que presentaron el proyecto, y declararon que la pena mínima de tres años se constituye como castigo para “un simple delito, fácilmente sustituible por una multa o por otras medidas alternativas a la prisión”.
En el contexto de este marco penal, “el victimario por lo general queda libre y reincide”, dijeron los parlamentarios citados a través de un comunicado.
La fuente indicó que el Ministerio Público recibe a unas 4.000 víctimas de violación por año, la gran mayoría menores de 14 años, según datos de Fiscalía.
“El daño que sufren las víctimas de violación es terrible, desde lo físico pasando por lo psicológico. Estos casos configuran una experiencia traumática que posteriormente requiere de un tratamiento integral, que aún no consigue borrar por completo las secuelas de este tipo de hechos”, señalaron los senadores.
Esas apreciaciones surgen tras hacerse público hace dos semanas, el caso de una niña de 10 años con un embarazo de 22 semanas, presuntamente violada por su padrastro. La pequeña sigue bajo los cuidados de la Cruz Roja, mientras que la madre está en prisión preventiva por supuesta complicidad con el padrastro.
Y a principios de esta semana se conoció un caso similar, el de una menor de 13 años embarazada de cinco meses.
De acuerdo con las cifras de 2014, 684 menores de entre 10 y 14 años dieron a luz ese año, mientras que unos 20.000 de los alumbramientos fueron de madres de 15 a 19 años.