Carmen Villalba seguirá en la FOPE

El juez de Ejecución Penal, Víctor Medina, y la fiscala Celia Beckelmann inspeccionaron ayer la celda de Carmen Villalba en la cárcel de mujeres del Buen Pastor.

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Constataron que la misma no se encuentra en condiciones para albergar a la condenada por secuestro de María Edith Debernardi.

El juez Medina explicó ayer tras la inspección realizada en horas de la tarde, que observó que las paredes del calabozo donde estaba alojada la autonombrada portavoz del Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP) se encuentran muy húmedas. Informó también que los barrotes están muy viejos, por lo que tienen que ser removidos y reemplazados por otros nuevos.

El magistrado señaló que durante el recorrido por la correccional femenina notó, además, que el sitio no cuenta con cámaras de seguridad y otros detalles que debe tener el reclusorio para albergar a una interna considerada de alto riesgo, como es el caso de Carmen Villalba.

Dos meses de reparación

El juez Víctor Medina enfatizó que desde la dirección del Buen Pastor le explicaron que se tardará un máximo de 60 días en las reparaciones y el acondicionamiento del sitio.

Eso supone que Carmen Villalba continuará recluida en el cuartel de la Fuerza de Operaciones de la Policía Especial (FOPE), de la Policía Nacional, donde está desde el pasado 23 de agosto por orden del juez Medina.

La semana pasada el magistrado ya había dado la orden para que la sentenciada por el secuestro de María Edith Bordón de Debernardi permanezca por 30 días en la citada dependencia policial, pero ahora el magistrado señaló que ese periodo se extenderá por el tiempo que sea necesario para acondicionar la celda de máxima seguridad para alojar a la reclusa.

Carmen Villalba, condenada a 18 años de prisión por el secuestro de la esposa de Antonio Debernardi, escapó del Buen Pastor el 24 junio de 2004, a través de un buraco en el techo de la celda donde estaba alojada.

La delincuente fue recapturada el 3 de julio de ese mismo año, junto a su marido Alcides Oviedo Brítez, después de una persecución a tiros mantenida con efectivos policiales en la ciudad de Ñemby.

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