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Las instalaciones del Frigorífico Guaraní se encuentran sobre la avenida Santa Teresa y calle Coronel Francisco Martínez, barrio Santa María, que comparten Asunción y Fernando de la Mora.
La fuga del tóxico aparentemente ocurrió en la parte posterior de la industria, hacia el sector de la calle Riachuelo, a una cuadra del límite con Asunción. El primer incidente fue a las 14:00 y el segundo a las 16:00, relató un bombero voluntario.
De acuerdo a los datos brindados por el Crio. Princ. Prudencio Burgos, jefe de la comisaría 2ª Central, una válvula se rompió y ocasionó la pérdida del compuesto químico que cumple la función de enfriamiento de la cámara frigorífica.
Sin embargo, el uniformado aseguró que de inmediato se solucionó el problema y la fuga fue mínima.
Pero el fuerte olor afectó a cerca de 30 vecinos, de los cuales 20 se encontraban en un cumpleaños a pocos metros del frigorífico. Muchas de esas personas fueron asistidas por bomberos y paramédicos, y otros se trasladaron a diferentes centros asistenciales ante el temor de afecciones.
No obstante, la Policía solo registró seis intoxicados, según los intervinientes.
Los bomberos voluntarios acudieron al sitio alrededor de las 18:00, pero los responsables de la instalación industrial no permitieron el ingreso hasta las 20:00, aproximadamente, cuando dos “matafuegos” equipados con oxígeno verificaron el sitio donde se produjo la fuga.
Al salir dijeron que la situación fue controlada y que la fuga fue mínima. “Si se trataba de una fuga importante, no estaríamos parados acá (frente al frigorífico); los propios empleados se hubieran desmayado, sentirían serias molestias”, señaló uno de los voluntarios.
Preocupación
Sin embargo, las explicaciones no convencieron a los preocupados vecinos, quienes llegaron hasta la puerta del frigorífico y exigieron a gritos la clausura del local y el traslado a otro lugar.
Al respecto, funcionarios municipales señalaron que el traslado del frigorífico está en proceso y depende del dictamen del juez de Faltas.
Los vecinos cuestionaron que ningún funcionario de la Seam ni de la fiscalía se acercaron al lugar para verificar lo ocurrido.