“Narcopolicía” fue remitido a Tacumbú

El suboficial principal de policía Julián Franco, quien fue arrestado en Capiatá el viernes de tarde cuando negociaba la venta de más de 10 kilos de cocaína, fue remitido ayer de tarde a la cárcel de Tacumbú por orden de la jueza Teresita Sánchez, junto a los otros cuatro detenidos por el caso.

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El uniformado, quien prestaba servicios en la Brigada 3 de Investigación de Delitos, fue conducido desde la base del departamento Antinarcóticos, en Lambaré, hasta el departamento Judicial, y de ahí directamente al penal de Tacumbú, poco después de las 13:00.

Los investigadores también remitieron a la cárcel a los otros cuatro detenidos en la operación llevada a cabo el pasado viernes de tarde en el estacionamiento del supermercado “Real”, ubicado en el Km. 16,5 de la Ruta I.

Se trata de Juan Manuel Galeano, Luis Andrés Garay, Nelson Pereira Lovera y Ángel Enrique Fernández Aveiro.

Todos los citados cayeron luego de un minucioso trabajo de inteligencia que hicieron agentes de Antinarcóticos, a cargo del comisario principal Rufino Gill, quienes venían vigilando desde hace varios meses las actividades ilícitas del suboficial Franco.

El policía comenzó a levantar sospechas después de que, repentinamente, comprara lujosos vehículos, como una camioneta Mitsubishi Tritón y un automóvil BMW Z3.

Los operativos que derivaron en la captura del policía y sus cuatro cómplices se inició el jueves de madrugada, a partir del decomiso de 30 kilos de cocaína en Coronel Oviedo, del poder de dos miembros de la red. Después de la detención del uniformado con otros 10 kilos de la droga, fueron hallados otros 30 kilos en una casa de Laurelty, Luque, con lo que en total la organización perdió 50 kilos del “polvo blanco”.

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