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JOSÉ DOMINGO OCAMPOS (Carlos Mariano Godoy, redacción regional).-En medio de profundo pesar y tristeza, una multitud de compueblanos del militar fallecido se congregó ayer en su humilde domicilio, ubicado en el barrio San Antonio de esta ciudad, para recibir el ataúd.
Los vecinos corearon la canción “Patria Querida” cuando los miembros de las FF.AA. bajaban el féretro del coche fúnebre para ubicarlo debajo del techo de paja donde el joven jugaba cuando era niño.
Las maestras de escuela y colegio de Hugo Monges Ramírez, así como sus tíos, hermanos, primos, amigos, excompañeros y el intendente municipal local Aureliano Acosta exteriorizaron su congoja por lo sucedido y reprocharon con vehemencia al EPP, uno de cuyos miembros mató al citado vicesargento.
También pidieron al gobierno de Horacio Cartes que se intensifique con firmeza la lucha contra los “guerrilleros que dicen ser defensores de los pobres, pero finalmente matan a los mismos”.
La que fuera profesora de escuela del militar caído, María Cabrera, dijo de él que fue un excelente alumno, un tanto tímido, y que siempre quiso convertirse en militar. Agregó que su sueño era ser alguien en la vida, ayudar a su familia a salir de la pobreza, pero que “fue truncado por las balas asesinas” del EPP.
Desde muy temprano, ayer los vecinos de Hugo Monges se reunieron en su casa paterna, prepararon el sitio para recibir el cuerpo del “hijo querido de José D. Ocampos”.
Sepelio
La inhumación del cuerpo del vicesargento ultimado por el EPP se realizará hoy en horas de la tarde, teniendo en cuenta que sus familiares aguardan que dos de sus hermanos, Alcides y Antonia Monges, lleguen de Buenos Aires, Argentina, para despedirlo.
Según señalaron sus parientes, Hugo Monges debía cumplir 22 años el próximo 6 de junio, y que hace un año y medio se graduó en la escuela militar. Es hijo de Hugo Monges, de 53 años de edad, y de Porfiria Ramírez de Monges (42). Sus hermanos son Laura, Liza, Liz, Antonia y Alcides Monges.