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Sin embargo, Quesnel seguirá recluido en la penitenciaría de Tacumbú, porque, en el otro proceso abierto por la venta irregular de tierras indígenas del Chaco, tiene decretada la prisión preventiva por parte de la magistrada Gricelda Caballero.
En la víspera, el juez Delgado no le impuso las obligaciones, como comparecencia mensual y prohibición de salir del país, entre otras medidas, ya que aguardará hasta que Quesnel obtenga su libertad en la otra causa.
El fiscal René Fernández se allanó al pedido realizado por el abogado Hugo López, en representación de Quesnel.
El lunes pasado, la exadministradora del Indi Marlene Mendoza Ferreira fue beneficiada con la libertad por compurgamiento de la pena mínima de 6 meses. El mismo instituto procesal que favoreció a Quesnel, ayer.
El juzgado le impuso fianza real de G. 1.000 millones a Mendoza Ferreira, para beneficiarse con la libertad.
En la causa en la que se investiga la desaparición de los G. 3.100 millones que debían ser utilizados a favor de dos comunidades indígenas, aún se encuentra con prisión preventiva el expresidente de la Fundación Reforeast Par, Óscar Viera, y el funcionario del Indi Éver Ramón Otazo.
Según los documentos que obran en el expediente y carpeta fiscal, Viera recibió por parte de Quesnel la transferencia de los G. 3.100 millones para que la fundación realice las obras que correspondan para beneficiar a las dos comunidades indígenas del Chaco.
El dinero, que se ha “esfumado”, fue producto de una multa que le impuso la Corte Interamericana de Derechos Humanos al Estado, por violación de derechos de los pueblos originarios, según los datos.