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El caso trascendió el viernes último, luego de que un escáner detectara que una encomienda embarcada en Estados Unidos por la empresa Frontliner contenía dos poderosos fusiles de guerra, calibres 5.56, que estaban desarmados.
La firma de courrier involucrada figura a nombre de Giuliano Manuel Pecci Folgar (33), hijo del titular de la Secretaría Nacional de Deportes (SND), Víctor Manuel Pecci. Otros que aparecen como accionistas son Diego López y Dustin Rangel, según los datos a los que accedió ABC Color.
Las armas venían a nombre de Miguel Ángel Marín Rojas, quien era el que debía retirar el paquete en el aeropuerto. Inicialmente, los propios funcionarios del área de Cargas Aéreas de la Dinac intentaron ocultar el hecho; ni siquiera dieron aviso a la Policía, ni a la Fiscalía. De hecho, en el Ministerio Público de Luque hasta ayer no había una denuncia formal, ya que los funcionarios aeroportuarios reportaron el hallazgo directamente a la Dimabel, que depende de las Fuerzas Armadas.
Lorenzo Orué, quien es asesor del presidente de la Dinac, Luis Aguirre, dijo ayer a ABC Color que ellos no denunciaron el hecho porque supuestamente era responsabilidad de la Dimabel.
El titular de la unidad militar, Gral. Div. Enrique Caballero, mencionó ayer que ya abrieron un sumario a la empresa de courrier de Pecci y confirmó que se trató de un caso de tráfico, ya que fue totalmente ilegal la forma en la que intentaron introducir las armas al país. Señaló que cada fusil cuesta unos 11.000 dólares en el mercado negro.
Si es que finalmente algunas de las instituciones se animan a denunciar la situación, la Fiscalía podría tomar intervención oficial hoy para tratar de descubrir quienes son los responsables del tráfico de armas.
Este medio trató sin éxito de contactar con Giuliano Pecci -también a través de su padre Víctor Pecci- y la empresa Frontliner para tener su versión sobre el caso.