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De acuerdo con el relato de los uniformados, poco antes de las 23:00 del martes, dos de los maleantes descendieron de una camioneta negra que dejaron estacionada, con el motor en marcha y presumiblemente al mando de otro cómplice, en el portón del motel.
Ambos desconocidos pistolas en mano irrumpieron en el lugar, redujeron a punta de armas a los guardias y empleados administrativos.
Después, los maleantes se dirigieron directamente hasta la oficina, donde estaba una caja fuerte que fácilmente lograron alzar y llevar hasta el vehículo para finalmente escapar del lugar, explicaron.
Luego, los delincuentes que hablaban con un acento brasileño, destrozaron parte de las instalaciones del circuito cerrado y se llevaron el disco duro del mismo, por lo que no quedaron imágenes del millonario golpe.
Un hecho relevante para los uniformados fue que los asaltantes conocían perfectamente los movimientos del motel, inclusive conocían en cuál de las oficinas estaba guardada la caja fuerte, que contenía las recaudaciones de los últimos días, que según los oficiales intervinientes alcanzarían los G. 200.000.000.
Tras la denuncia del hecho, agentes de la comisaría 10ª Central y personal de Criminalística llegaron hasta el lugar, donde levantaron algunas evidencias, como huellas dactilares, que según explicaron podrían corresponder a uno de los sospechosos, señalaron.