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ARROYOS Y ESTEROS, Dpto. de Cordillera (Desiré Cabrera, de nuestra redacción regional). A la hora mencionada en que ocurrió el fatal percance se estaba quemando pastizales en los campos adyacentes a la ruta. José Pappalardo, dueño de la propiedad, afirmó que los responsables del hecho fueron cazadores o pescadores furtivos, que suelen entrar a su campo sin permiso. Los mismos, según el ganadero, queman los arbustos para abrirse camino o hacer salir a los animales y proceder a cazarlos.
El empresario señaló que sus empleados no se dieron cuenta de la situación por estar trabajando hacia el fondo de su establecimiento.
Manifestó que no es la primera vez que los irresponsables queman su campo. Esto ya le ha causado muchos perjuicios como la quema de postes del alambrado de la propiedad.
En el grave accidente ocurrido el viernes fallecieron el médico veterinario Luis Marino Gill Benítez (45); su hermano Artemio Ramón Gill Benítez (51), y la esposa del primero, Olga Elizabeth Acosta Rivas (40), todos domiciliados en San Estanis- lao. Esta última era prima hermana de la diputada por el departamento de San Pedro Perla de Vázquez (ANR).
Según datos policiales, las víctimas se dirigían a Asunción en una camioneta Nissan Frontier gris modelo 2000 con matrícula ADP 998, conducida por Luis Marino Gill.
La intensa humareda de la quemazón se apoderó de una extensión considerable de la ruta, haciendo prácticamente nula la visibilidad para el conductor. Aparentemente por esta causa la Nissan Frontier pasó al carril contrario y colisionó en forma violenta con un camión Scania rojo con chapa CCK 348, guiado por Marcelo Benítez.
Casi al mismo tiempo, una camioneta Hyundai Tucson gris plateada con chapa BRL 935, conducida por Karl Martens (46) y que seguía a la Nissan Frontier, la embistió por detrás y a consecuencia del choque este último vehículo quedó aplastado entre los otros dos rodados.
El accidente produjo a continuación un choque en cadena que implicó a otros cuatro vehículos que transitaban por la ruta y cuyos conductores no pudieron reaccionar ante el aparatoso choque que estaba frente a ellos, debido a que el humo imposibilitaba su visión.
Los demás rodados involucrados fueron una camioneta Ford Ranger con chapa BUF 608, conducida por Néstor Carrillo; una Chevrolet Pony LPZ negra con placa BPJ 508, que estaba al mando de Néstor Monzón; un camión de carga Mercedes Benz azul modelo 1113 con placa AEO 160, guiado por Amado Cáceres, y un automóvil Toyota Vitz blanco.
El impacto lanzó a este último hacia el pastizal en llamas, y al caer fue consumido por el fuego. Su conductora, María Lucila Salomón de Echagüe (49), se salvó de manera milagrosa. Todos los choferes fueron sometidos a la prueba de alcotest, arrojando como resultado 0.00 mg/L.