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Las fiscala Silvana Otazú, de la Unidad de Delitos Informáticos, y Fátima Escobar, tutelar del menor, se constituyeron ayer en el centro educativo jesuita que se ve envuelto en un caso de presunto acoso sexual a alumnas, por parte de sus propios compañeros.
El colegio, asimismo, tomó la determinación de denunciar el hecho y colaborar con la investigación.
En este caso, también fue convocada la defensora pública de la Niñez, Marina Soerensen, teniendo en cuenta que los presuntos autores del hecho son adolescentes, como las víctimas.
Por el centro educativo tomaron intervención los abogados Jorge Bogarín, Fátima Bucchini y Angelina Luna, quienes recomendaron al director Lic. Ezequiel Zárate la colaboración abierta para el esclarecimiento en la instancia penal.
En ese sentido, Bogarín explicó a ABC que comunicaron a las fiscalas Otazú y Escobar las denuncias de madres y alumnas, que fueron realizadas en el colegio privado.
En las denuncias se habla de una página o drive donde se comparten fotografías de partes íntimas de las alumnas, quienes son víctimas de las tomas gráficas cuando suben las escaleras.
Estos materiales, sin embargo, nunca llegaron a las autoridades del colegio, aseguró el abogado.
Asimismo, se habla de identificación de los alumnos que tomaron las fotografías y viralizaron las mismas, pero de manera extraoficial, se lleva a cabo el protocolo de protección a menores de edad.
Discurso y sentata
El caso de presunto acoso sexual a alumnas del colegio Cristo Rey tomó estado público por el discurso de una alumna en plena formación dentro de la institución, donde detalló la forma de abuso que sufren. A su vez, se hizo una sentada de protesta contra esos actos. Se exigió, asimismo, sanción disciplinaria para los autores y se aseguró que la práctica lleva años. Las madres y las adolescentes que denunciaron el caso serán citadas a prestar declaración testifical.