Cargando...
El pasado 16 de diciembre, el agente fiscal Federico Leguizamón Noguera presentó un acta de imputación contra el joven Juan José Benítez (25) por supuesta responsabilidad en un homicidio doloso.
Según el acta de imputación, “existen suficientes elementos de sospecha acerca de la existencia del hecho punible de homicidio doloso”.
La investigación del Ministerio Público gira en torno a la muerte del ciudadano Carlos Ayala Martí.
La muerte tuvo lugar a las 9:20 de la mañana del 16 de diciembre último, en el Hospital San Pablo.
El agente del Ministerio reconoce que su imputación se basa en la denuncia presentada por Miguel Leiva Martí, hermano de Carlos Ayala, el fallecido.
Según la denuncia de Miguel Leiva Martí, alrededor de las 4 de la madrugada del 16 de diciembre, Juan José Benítez “agredió físicamente a su hermano Carlos Ayala”. Sostiene que “a consecuencia de los golpes recibidos fue llevado hasta el hospital San Pablo, donde fue asistido por el doctor de guardia, confirmándose su deceso a las 9:20 aproximadamente”.
Tomando exclusivamente la denuncia del hermano del fallecido, el fiscal Federico Leguizamón Noguera elabora el acta de imputación “por la comisión del hecho punible de homicidio doloso”.
El fiscal solicitó al juzgado “que en atención a las circunstancias que exige una acabada investigación de este caso específico, se requiere la utilización del tiempo de seis meses a los efectos de formular acusación” (negritas son nuestras).
Fanfarronada del fiscal
Federico Leguizamón Noguera habla de la necesidad de una “acabada investigación”.
El mismo domingo 16 de diciembre Juan José Benítez fue detenido por la Policía Nacional y actualmente se encuentra en Tacumbú.
De más esta decir que mientras el fiscal realiza su “acabada investigación” el joven de 25 años permanecerá en la penitenciaría.
El acta de imputación deja constancia de que en el Hospital San Pablo Carlos Ayala Martí recibió asistencia del doctor Alfredo Meza, quien “manifestó que el cuerpo será trasladado a la morgue judicial del Ministerio Público para la realización de la autopsia”.
Resultado de la autopsia: muerte natural
El acta de imputación debe estar basado en hechos comprobables e indicios creíbles; la suma de documentos dan pie a un posible juicio por la comisión de delitos.
El primer problema que tiene el fiscal Federico Leguizamón Noguera es que el equipo médico forense del Ministerio Público dice que Carlos Ayala Martí tuvo una muerte natural.
Si los forenses dicen que la muerte no fue violenta, ¿por qué el fiscal presenta una imputación por homicidio doloso?
La autopsia fue firmada por los doctores Carolina Bernal y Gustavo Zaracho, mientras que el asistente fiscal Rubén Benítez Ríos labró el acta de la intervención forense.
El documento es contundente: “Se determina causa de muerte accidente cerebro vascular hemorrágico no violento” (negritas son nuestras).
No termina aquí: “Tras la apertura del cráneo se observa una hemorragia intracraneana parietal izquierda sospechando que su origen proviene de una malformación arterial venosa no violenta” (negritas son nuestras).
El Dr. Pablo Lemir, director de Medicina Forense del Ministerio Público, luego de leer el informe dijo: “La muerte del joven fue natural, no estamos en presencia de un homicidio”.
Llegamos a conversar con el fiscal Federico Leguizamón Noguera a quién pedimos una explicación sobre la imputación, nos pidió tiempo para responder el llamado porque estaba en un procedimiento.
Seguimos esperando.
roque@abc.com.py